El número 8 de la lista cubre la baja por dimisión del único concejal de IU en Lepe
Izquierda Unida ha tardado tres meses en cubrir el sillón de su único concejal en Lepe, y lo ha hecho con el puesto número 8 en la lista que presentó en la últimas Elecciones Municipales. De fondo existen problemas personales de algunas de las personas que se encuentran de los puestos a 2 al 7, pero también el amparo que ha tenido por sus compañeros el hasta septiembre portavoz, Javier Valderas, que dejó el cargo por sorpresa al finalizar el Pleno de septiembre, porque no está de acuerdo con el pacto que ha dado origen a Unidos Podemos.
Entre una cosa y otra, IU no ha sido capaz de cubrir el sillón del que ha sido su portavoz en las tres últimas legislaturas, hasta que ha tenido que ser la asamblea local la que designase a Carmelo Cumbrera, un trabajador social que tomará posesión de su cargo a finales de este diciembre, cuando tenga lugar el Pleno ordinario de este municipio, el mayor en habitantes de la provincia de Huelva.
Desde Izquierda Unida se asegura que con este nombramiento se espera cerrar el capítulo abierto el pasado 29 de septiembre, cuando Valderas presentó su dimisión, aunque no profundiza en las causas que han motivado este receso de tres meses para cubrir la baja. Y es que, aunque Valderas dimitía de forma sorpresiva, en el seno de su partido se sabía de la decisión que iba a tomar, pero la gente que le seguía en la lista electoral no se dio por aludida a la hora de sentarse en su sillón.
Las diferencias entre Valderas, el único hijo de Diego Valderas que ha hecho carrera política, y la dirección de su partido han tenido capítulos más o menos intensos, pero desde IU se admite que “eran tensas, sobre todo con altos cargos, a los que no tenía reparo en reprocharles decisiones como el pacto con Podemos”, lo que hizo en determinadas ocasiones en privado y en otras en reuniones provinciales, regionales o a nivel nacional.
La gota que colmó el vaso para el portavoz lepero fue que su partido y Podemos fuesen como uno solo a las últimas elecciones. Ahí comenzó un proceso para desvincularse del partido que terminó la noche del pasado 29 de septiembre. Ese día, al final de un Pleno sin muchas incidencias, Valderas dimitía “de forma irrevocable” de su cargo en el punto de ruegos y preguntas del Pleno, durante una sesión en la que había intervenido con normalidad en los puntos que se habían debatido, hasta que llegaba el momento el que, sin previo aviso, anunciaba que abandonaba su cargo de concejal, aunque se mantiene como militante de base de Izquierda Unida y el Partido Comunista.
“Uno se encuentra a veces en encrucijadas”
En una carta abierta publicada al día siguiente, expresaba que “en la política, como en la vida, o en la política como parte de la vida de una persona como es mi caso, uno se encuentra a veces en encrucijadas, llamémoslas existenciales, para las que son difícil tomar una decisión”, para señalar que las personas de su entorno saben que “llevo tiempo meditando si seguir o no seguir como representante público”.
Para él, seguir en su cargo apoyando pactos como el alcanzado por su partido con Podemos sería “continuar navegando en la contradicción interna de representar un proyecto que, desgraciadamente y deseando estar equivocado, a día de hoy no comparto, y en el que por lo tanto a lo único que te limitas es en primer lugar a hacerte daño y en segundo lugar a contraponer cualquier decisión que se tome, volviéndote un ser dañino sobre todo para ti mismo”.
“Mi conciencia, que es mía y de nadie más, ni acertada ni errada, ni mucho menos ejemplo para nadie, mía, me dice que debo dar un paso atrás y dejar mi representación como cargo público de una organización a la que amo, llena de compañeras y compañeros de un valor incalculable a los que les debo mucho en todos los sentidos, tanto a nivel local, como provincial, cómo autonómico y nacional”, ha dicho.
Por eso, volvía a la militancia de base, “dejando mi cargo de portavoz municipal, de coordinador local y de miembro de la dirección provincial de Izquierda Unida y del partido, para aportar desde allí mi granito de arena a la construcción de un proyecto socialista e internacionalista en beneficio de la clase obrera”.
Ahora, Izquierda Unida en Lepe intentará focalizar el trabajo en la calle, consciente de que su portavoz municipal no es una persona políticamente conocido. Es miembro del Consejo Provincial de Izquierda Unida en Huelva y formó parte de la candidatura de las pasadas Elecciones Municipales en Lepe, que encabezaba el anterior edil de IU, Javier Valderas, y lleva varios años participando en la actividad política y social de Izquierda Unida, donde ha formado parte de recientes candidaturas, tanto al Parlamento Andaluz como al Senado.
No obstante, Javier Valderas y su equipo han mantenido representación municipal en las tres últimas legislaturas, y por ahí pasa el reto que tendrá que coordinar la asamblea local, de forma paralela al trabajo en el Ayuntamiento.