La Policía detiene en Oviedo a dos hermanos empresarios acusados de crear una red de explotación de migrantes
La Policía Nacional ha detenido a dos hermanos empresarios en Oviedo que se dedicaban presuntamente a captar a extranjeros que generalmente tenían una situación administrativa irregular en España y a los que prometían falsos contratos laborales para trabajar en labores de desbroce, tala de montes y carreteras en Asturias a cambio de “elevadas cantidades económicas” para arreglar unos papeles que nunca llegaban.
Los dos hermanos han sido acusados de su presunta autoría en delitos contra los derechos de los trabajadores. La actuación policial que ha culminado con estas dos detenciones se enmarca dentro de la denominada “Operación Forestal”.
Otro detenido en octubre
Los empresarios formaban parte presuntamente de una red más amplia que fue destapada el pasado mes de octubre tras el arresto de otro presunto implicado y tras la declaración de varias víctimas que ratificaron la misma versión de que estaban siendo explotadas laboralmente.
Las víctimas eran obligadas a realizar trabajos en condiciones precarias, con jornadas laborales extenuantes que comenzaban al alba y finalizaban al anochecer, sin descanso semanal y sin las mínimas condiciones de seguridad
La Jefatura Superior de Policía de Asturias ha explicado este miércoles que las víctimas eran obligadas a realizar trabajos en condiciones precarias, con jornadas laborales extenuantes que comenzaban al alba y finalizaban al anochecer, sin descanso semanal y sin las mínimas condiciones de seguridad.
Algunos trabajadores no estaban dados de alta en la Seguridad Social, carecían de formación en prevención de riesgos laborales y no disponían de equipos de protección individual, a pesar de manejar maquinaria peligrosa.
Tampoco las promesas económicas se cumplían. En un comunicado oficial, la Policía Nacional ha ratificado que el salario que se les abonaba por el trabajo desarrollado era muy inferior al mínimo legal, llegando en algunos casos a ser de 300 euros al mes e incluso en algunos casos ni siquiera cobraban por el trabajo desarrollado.
Asimismo, los trabajadores eran alojados en viviendas facilitadas por los propios responsables, en las que compartían espacio con un elevado número de personas, y cuyo alquiler era descontado directamente de su sueldo.
Las vigilancias permitieron conocer que se utilizaba un local tipo garaje en Oviedo como punto logístico, donde cada mañana se agrupaba a los trabajadores y se les organizaba por destinos.
Los investigadores no descartan la existencia de un posible sistema de captación internacional, donde se exigía a las víctimas el pago de cantidades de dinero cercanas a los 12.000 euros, a cambio de un precontrato de trabajo que supuestamente les permitiría obtener visado y permiso de residencia en España
La Jefatura Superior sostiene que las víctimas recibían amenazas y coacciones para evitar que abandonaran la empresa o buscaran otros empleos.
Los investigadores no descartan la existencia de un posible sistema de captación internacional, donde se exigía a los trabajadores el pago de cantidades de dinero, cercanas a los 12.000 euros, a cambio de un precontrato de trabajo que supuestamente les permitiría obtener visado y permiso de residencia en España.
Estos pagos se realizaban por adelantado y se completaban mediante descuentos del salario.
En la operación han participado distintas Unidades de la Policía Nacional en colaboración con la Inspección Provincial de Trabajo y Seguridad Social.
La investigación se ha desarrollado desde el 6 de febrero hasta el 26 de mayo de 2025 y ha permitido poner los hechos en conocimiento de la autoridad judicial competente, en el marco de un procedimiento penal ya iniciado, según ha corroborado la Jefatura Superior de Policía de Asturias.
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