Las ayudas COVID para alquiler solo han beneficiado a 34 familias hasta septiembre

Treinta y cuatro familias han recibido una ayuda al pago del alquiler de su vivienda dentro del programa habilitado por el Gobierno de Cantabria para paliar los efectos de la COVID-19. El gasto realizado hasta finales de septiembre apenas ha superado los 60.000 euros, según los datos recogidos en el Plan Presupuestario 2021, que el Ejecutivo ha elaborado de cara a la aprobación del próximo presupuesto de Cantabria.

Se trata de una de las partidas con más bajo impacto de todas las ayudas personales que se han dispuesto desde que en marzo se declarara el estado de alarma por la pandemia; ayudas como cheque-resistencia y cheque-autónomo, ayudas a comedores escolares y complementos a la Renta Social Básica, entre otros.

La ayuda de vivienda va destinada a familias en situación de vulnerabilidad económica y social y que tienen problemas transitorios para atender al pago parcial o total del alquiler. Hasta la fecha, y según datos del Gobierno, este programa ha beneficiado a 34 familias con un desembolso de 66.428 euros, sin que se detalle el número de solicitudes recibidas.

El cheque-resistencia, una de las intervenciones estrella del paquete de medidas, ha tenido 8.000 solicitantes aprobados, con un gasto previsto de 12,2 millones de euros, a razón de 1.528 euros por solicitud. La ayuda la concede Sodercán con el fin de paliar el impacto derivado de la crisis sanitaria ocasionada por la COVID-19 sobre las microempresas y autónomos de Cantabria.

El cheque autónomo también lo concede Sodercán y consiste en una única ayuda de 286 euros. En la actualidad se llevan aprobadas 6.942 solicitudes por un importe de 1,9 millones de euros, sin que se detalle el alcance real de los pagos.

Las ayudas a personas trabajadoras con rentas bajas afectadas por ERTE, consistentes en un pago de 200 euros por persona, han supuesto pagos de 6,4 millones de euros a 31.526 beneficiarios.

Como complemento a los perceptores de la Renta Social Básica, medida destinada a reforzar la protección a la familia y la atención a la pobreza infantil, se han concedido 2.000 ayudas, lo que ha supuesto un gasto de 1,5 millones de euros. La ayuda consistió en 75 euros mes por hijo durante seis meses.

Otra de las ayudas fue la destinada a comedores escolares a domicilio. Consiste en el suministro de comida a domicilio de aquellos alumnos que disfrutaban de un descuento superior al 75% en el precio diario del servicio de comedor escolar desde el 24 de marzo hasta el final del período lectivo del curso 2019-2020. Ha beneficiado a 1.500 alumnos y ha supuesto un gasto de 315.600 euros.

En cuanto al suministro de material para recibir educación en casa, vía on-line, se han gastado 307.000 euros en la compra de ordenadores, routers inalámbricos y tarjetas de datos.

Por reducción de jornada laboral, se habilitó una ayuda económica. Sin que se detalle el número de beneficiarios de esta ayuda de tres meses, se dotó una partida específica por un millón de euros. Este fue un acuerdo negociado con patronal y sindicatos y consistía en pagos únicos de 600 euros al mes por excedencia o reducción de jornada de más del 80%, de 450 euros si es mayor del 60%, y de 300 euros si la reducción es de entre el 40% y el 60% de la jornada.

Las ayudas directas a empresas y autónomos del sector turístico se han traducido en 2.042 solicitudes por un importe de 620.750 euros, sin que se detalle el grado de cumplimiento del programa.