Los principales ayuntamientos de Cantabria disparan su gasto político
La primera de las medidas que están obligadas a tomar las diferentes corporaciones municipales tras su constitución es aprobar los sueldos de alcaldes y concejales, así como sus dedicaciones y la contratación, si lo considerasen necesario, de personal de confianza. De esta forma, los diferentes ayuntamientos de Cantabria, a lo largo de este mes desde que se produjeron las sesiones de investidura el 15 de junio, han fijado sus respectivos Plenos para sacar adelante este cometido.
Y lo han hecho sin escatimar en recursos, puesto que la tónica general de los principales consistorios de la Comunidad ha sido la de disparar el conocido como gasto político respecto a la pasada legislatura. El caso más llamativo se ha producido en Santander, donde el Ayuntamiento aprobó, tal y como desveló en exclusiva este medio, incrementar en 300.000 euros anuales el gasto en asesores y personal de confianza.
Y es que los diferentes grupos aprobaron por unanimidad duplicar el número de cargos de confianza, que pasan de diez a veinte, lo que supone que la alcaldesa recupera el puesto de jefe de gabinete que no se había ocupado en los últimos años. PRC, Unidas por Santander y Vox achacaron esta subida a las condiciones que estableció Ciudadanos al PP para apoyar su investidura.
No obstante, la capital no es el único municipio que verá incrementada su partida para gastos políticos en esta legislatura. En Torrelavega, alcalde y concejales cobrarán lo mismo, pero el equipo de Gobierno tendrá en esta legislatura 11 de 16 concejales liberados, cuatro más que en el mandato anterior. Este nuevo escenario desató las críticas de Unidas Podemos tanto al bipartito como a las fuerzas de la oposición, PP, ACpT, y Torrelavega Sí, que se abstuvieron en la votación.
Por su parte, Castro Urdiales aprobó este jueves duplicar el gasto en personal político, con un aumento de los salarios de Alcaldía y ediles, así como con la recuperación del personal de confianza que había sido suprimido por el anterior equipo de Gobierno de CastroVerde, formación que ahora en la oposición ha manifestado su disconformidad con este nuevo panorama en el Ayuntamiento.
Otro de los municipios en los que ha habido polémica en torno a este asunto es Camargo, donde la alcaldesa, Esther Bolado (PSOE) cobrará un 27,4% más que en la anterior legislatura y el primer teniente de alcalde, Héctor Lavín (PRC), un 35% más. Ambas formaciones tienen mayoría absoluta por lo que de nada sirvió el voto en contra de PP y Ciudadanos, que consideraron la subida “desproporcionada”.
En Piélagos, por su parte, el equipo de Gobierno de PSOE, PRC y AVIP (Asociación de Vecinos Independienes de Piélagos) incrementa en dos el número de concejales liberados con dedicación exclusiva y en otros dos con dedicación parcial, de forma que el gasto político se dispara en un 118%, de los 143.000 euros brutos anuales en la anterior legislatura a 313.600 de la actual, una subida que Podemos tildó de “vergonzosa”. Asimismo, Laredo y Santoña aprobaron una subida de un 12% y un 46% respectivamente para sueldos de concejales liberados.
Frente a esta tendencia generaliza, destaca la bajada se sueldo del alcalde de Astillero, Javier Soberón (Cs), que cobrará 48.386 euros brutos anuales con dedicación exclusiva, frente a los 51.475 euros del anterior alcalde, Francisco Ortiz (PRC), es decir, un 6% menos,
