Los futuros profesionales de la hostelería regional se forman en la puesta en valor y consumo moderado del vino de Castilla-La Mancha

Los futuros profesionales de la hostelería regional se están formando ya en la puesta en valor y el consumo moderado de los vinos producidos en Castilla-La Mancha, dentro una serie de jornadas formativas que han empezado este miércoles en Cuenca y que se irán celebrando a lo largo del mes en el resto de provincias de la comunidad.

Unas jornadas de formación a futuros profesionales de la hostelería y la restauración organizada por el Gobierno regional gracias al convenio de la Fundación Tierra de Viñedos y la Organización Interprofesional del Vino de España (OIVE) para fomentar la presencia del vino de la región en las cartas de los restaurantes y otros locales hosteleros.

De esta forma, el objetivo de estas jornadas es el fomento de un consumo moderado de vino, concienciando al mismo tiempo de la importancia del conocimiento en el servicio y la cata del vino para fomentar su consumo responsable.

Durante la formación, también se está incluyendo contenido específico sobre el consumo moderado de vino y los efectos en la salud, así como las pautas para un servicio responsable y la importancia de evitar el abuso de alcohol.

La primera de estas jornadas está teniendo lugar en el Centro de Formación Profesional Integrado número uno de Cuenca, y allí el viceconsejero de Medio Ambiente, Agapito Portillo, ha agradecido tanto a la fundación Tierra de Viñedos como al centro la acogida de estas jornadas.

“Castilla-La Mancha es la principal productora del sector vitivinícola del país”, ha asegurado el viceconsejero, quien ha recordado que aquí se produce más del 50% del vino de España y genera una actividad socioeconómica “muy importante”, que representa el 4,6% del PIB regional.

Mimar el vino en CLM

Además, en Castilla-La Mancha hay presentes nueve denominaciones de origen, una IGP así como diferentes pagos, pequeñas denominaciones de origen. “Pretendemos que el hostelero, cuando el consumidor vaya a sus centros, pueda ofrecer un vino de Castilla-La Mancha y seamos capaces de ponerlos en valor, ya que son de calidad, pero a veces no hay una conciencia social de la importancia”.

Por eso, con estas acciones para los futuros profesionales el objetivo es que a través del conocimiento del sector vitivinícola de la región “sean capaces luego en sus centros de trabajo, restaurantes, hoteles y demás de transmitir al consumidor cuando piden vinos de calidad, enseñarles y mostrarles los vinos de calidad de la región bien servidos, bien cuidados y bien mimados que produce el sector y que es capaz de suministrar”.