Una excavación en Sigüenza podría “despejar muchos interrogantes sobre la Edad Media”

Una conferencia dará a conocer los nuevos descubrimientos arqueológicos en Sigüenza (Guadalajara) tras la excavación realizada en la Iglesia de Santiago de esta localidad durante la quinta conferencia del ciclo 'Arqueología en Guadalajara. Trabajos inéditos 2018'.

Se trata de una investigación “que puede despejar muchos interrogantes sobre los primeros asentamientos de población en la Edad Media y su evolución a lo largo de todo ese período, un aspecto hasta ahora confuso y controvertido”, señalan desde el Museo Provincial de Guadalajara que organiza el evento.

Se celebra este jueves 25 de octubre a las 19.30 horas en el Salón de Actos de la Delegación de la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha en Guadalajara, con entrada libre hasta completar el aforo.

El director de los trabajos de excavación, Ricardo Barbas Nieto, hablará sobre los 'Nuevos descubrimientos de la Segontia Medieval' durante las labores realizadas en la iglesia de Santiago con objeto de reincorporarla al conjunto histórico patrimonial de la ciudad de Sigüenza.

En la última campaña 2017/2018. durante la excavación arqueológica sistemática de la nave central se han localizado los restos óseos del denominado “fundador”, personaje clave del siglo XV-XVI d.C. para entender la evolución del templo y su adaptación al nuevo uso que le fue asignado.

También se han descubierto arquitecturas subterráneas defensivas de alto valor histórico, datadas en fechas anteriores al siglo XII, únicas por su buen estado de conservación, que ofrecen nuevas líneas de trabajo de cara a la investigación, para descubrir novedosos datos de la historia del edificio y de la ciudad, potenciando el interés cultural del centro.

Estas intervenciones arqueológicas se han desarrollado en paralelo a las demás facetas de la investigación general del inmueble y se vienen desarrollando desde el año 2015. Fue entonces cuando se realizó la excavación arqueológica y lectura completa de la zona del presbiterio, donde se ha descubierto y mantenido el solado original del siglo XII, fecha de inicio de la construcción del edificio.

Ya en 2016, se utilizaron nuevas tecnologías para la lectura de la nave central del edificio, con introducción de análisis mediante georradar con el equipo de la Universidad Complutense de Madrid, hallando elementos subterráneos susceptibles de investigación.