Gimnasios itinerantes contra la despoblación de La Alcarria
“Una de las principales necesidades que tienen las personas para permanecer o ir a vivir a un lugar es un mínimo de servicios: escuelas, farmacias y médicos, supermercados y espacios deportivos, es por esa necesidad de la que nace nuestro proyecto, si la gente no puede ir al gimnasio porque sencillamente no existe, nosotros vamos a ellos”. Así de contundente explica Ernesto Carrasco la iniciativa de Gimnasio Móvil Rural ‘Mueve-T Gym’.
Este joven de Villalba del Rey comenzó montando un gimnasio completo en la localidad alcarreña para ir proporcionando este servicio a distintos municipios de Guadalajara y Cuenca localizados en la zona de la Alcarria Baja.
El proyecto trabaja mediante una agrupación de profesionales deportivos con formación que se encarga de montar gimnasios o salas deportivas en colaboración con los ayuntamientos locales. En Cuenca, Villalba del Rey y Huete son dos de los más de diez gimnasios o salas en total que agrupan esta iniciativa.
“En función de la demanda del pueblo ofrecemos nuestras clases y materiales. Por ejemplo, este va a ser el segundo año en el que estemos en Villalba del Rey. El año pasado ofertábamos una sesión de spinning o ‘ciclo-indoor’, mientras que este año hemos aumentando la oferta a todos los días con esta actividad y otras como pilates, o ‘body pump’ (ejercicios de levantamientos de pesas) una vez por semana, mientras que en Huete, pese a ser el primer año en el que estamos ya cuenta con toda la oferta durante turnos de mañana y tarde”, apunta Ernesto, quien asegura que entre las dos salas de ambos municipios llegan alrededor del centenar de practicantes, algo que les ha animado a continuar con actividades como clases de Zumba o entrenamiento funcional en el periodo estival tras acabar la temporada en junio.
El deporte como unión
Uno de los puntos que más llena a los distintos monitores de esta iniciativa de Gimnasio Móvil Rural es la aceptación que tiene en las localidades que aterrizan con su propuesta: “Obviamente tenemos público de todas las edades, en las sesiones de mañana suelen ser personas mayores que, de no ser por nuestra iniciativa, no harían deporte por no tener la accesibilidad para ello”, comenta el director de la iniciativa que asegura que “muchas de las recomendaciones que dan los propios doctores o médicos de los pueblos es asistir a este tipo de clases para realizar ejercicios de movilidad”.
Así, no es de extrañar que los participantes de los distintos municipios agradezcan su labor “y nos pidan que aumentemos las clases, es por lo que ya estudiamos seguir ampliando la iniciativa a más pueblos y formar a más monitores”, indica Ernesto.
Además de los beneficios que tiene para la salud, los monitores de estos gimnasios aseguran que sus clases se convierten en el centro de reunión: “El hacer deporte en grupo también tiene el componente positivo de motivarte, de relacionarte con otras personas o de conocerlas, es otro de los alicientes que lucha contra ese estereotipo de que la vida rural es una vida solitaria. La gente se anima, se divierte y disfruta de algo que es beneficioso para ellos. En mi pueblo, Sacedón, lo hemos notado, viene más gente”.
Está claro que la lucha contra la despoblación es una guerra muy grande, pero iniciativas como esta hacen que se tengan motivos para seguir intentándolo llenar esa ‘España vaciada’.
Otro de los motivos del éxito de esta propuesta de Ernesto Carrasco fue la participación en la pasada edición de la Carrera de la Mujer en Madrid por parte de varias de las que habitualmente acudían a los distintos gimnasios que se han realizado en las más de diez localidades entre Guadalajara y Cuenca de la Baja Alcarria.
Así, tras organizarlo en colaboración con los distintos ayuntamientos y consiguiendo fletar varios autobuses, lograron reunir a 142 mujeres en total, consiguiendo a su vez ser el segundo grupo más numeroso en esta carrera de ámbito nacional y que en este 2019 batió récord de participación con más de 36.000 mujeres llenando la capital de España.