La oficina antidesahucios de Cuenca paraliza un nuevo desahucio
La oficina de intermediación hipotecaria de Cuenca perteneciente a la red que la Consejería de Fomento del Gobierno regional abrió el pasado mes de octubre en las cinco capitales de provincia de Castilla-La Mancha y Talavera de la Reina ha conseguido detener un nuevo desahucio que iba a finalizarse este lunes 18 de enero. La familia propietaria de la vivienda está compuesta por tres adultos sin empleo y dos menores de edad, de 16 y 12 años.
Los familiares acudieron a la oficina durante la primera semana de diciembre de 2015 con la orden de lanzamiento de embargo. El 17 de diciembre el personal de la oficina conquense presentó un escrito en el juzgado correspondiente, aacompañado de un informe realizado a través de los recursos sociales. El desahucio ha quedado aplazado pero todavía no se ha comunicado el período de suspensión otorgado por la Justicia, según ha informado la Junta de Comunidades.
Se trata del cuarto lanzamiento paralizado por la red de oficinas de la Junta de Comunidades desde su apertura. Los tres casos anteriores tuvieron lugar en la provincia de Albacete. En Cuenca, la oficina ha ofrecido información a 25 familias del total atendido en la red de Castilla-La Mancha. De las 25 familias atendidas en Cuenca, 20 han requerido intervención social, 15 han precisado de asesoramiento jurídico y 9, intermediación.
Desde su apertura el 21 de octubre hasta el 31 de diciembre de 2015, el número total de solicitudes registradas en la red de oficinas de intermediación hipotecaria ascendía a 283, de los cuales 98 correspondían a la oficina de Toledo, 57 a la de Albacete, 39 a la de Guadalajara, 37 a la de Ciudad Real, 34 a la de Talavera de la Reina y 18 a la de Cuenca.
Hasta ahora la provincia de Albacete acumulaba los tres casos que habían requerido una intervención más urgente desde las OIH. La oficina de esta provincia ha evitado desde su apertura dos subastas de primera vivienda en Almansa y Albacete y un lanzamiento de una familia en La Roda sobre la que pesaba una orden de desalojo para el pasado 11 de diciembre y que el personal de la oficina albaceteña consiguió paralizar un día antes.
