La precariedad laboral caracterizó el año de mayor bajada del desempleo desde 2009
2016 ha terminado con 198.299 parados en Castilla-La Mancha. Una cifra que se sitúa por debajo de la barrera de los 200.000 desempleados desde el año 2009. Son los datos de paro registrado que ha difundido esta semana el Ministerio de Empleo y Seguridad Social.
Tanto PP como PSOE se atribuyen el mérito de este descenso en el paro regional. El Gobierno socialista apunta al “trabajo por parte de todos, sector privado y nosotros” que “está dando sus frutos”. Los populares dicen que es la reforma laboral de Mariano Rajoy la que está dando resultados y que derogarla sería “un error”.
La Junta subraya el trabajo realizado a través de los planes extraordinarios de empleo, en colaboración con las entidades locales, que reeditará en este año 2017 y que reserva un 25% a usuarios del Plan de Garantía de Rentas, además de incluir una nueva línea, el contrato de relevo, para que sean los jóvenes quienes cubran las sustituciones por jubilación. Unos jóvenes en los que el Gobierno regional incidirá de forma especial a través de proyectos de formación como Dual-Empleo y Formación Plus para mejorar la formación de trabajadores en las pymes.
También destaca el incipiente Pacto por la Recuperación de Castilla-La Mancha que incluye medidas para mejorar la actividad económica y, por tanto, el empleo en la región. Y finalmente, el Plan de Autoempleo que va más allá de las ayudas económicas convencionales ya que incluye un programa de acompañamiento a emprendedores.
“Moderar el triunfalismo”
La visión que desde los sindicatos se tiene del panorama regional laboral no es optimista y aunque CCOO y CSIF reconocen los datos positivos del descenso del paro apuntan a otros “detalles” que “enturbian” la tendencia porque existe un “trasfondo de precariedad, estacionalidad y pobreza salarial que exige derogar la reforma laboral”, según CCOO.
Y es que baja el paro pero el 94% de los contratos que se formalizan (según los datos del pasado diciembre) son temporales. Y otro tanto ocurre en el sector público que arroja una temporalidad cercana al 25% por ciento a nivel nacional, según CSIF. Un sindicato que aconseja “moderar el triunfalismo” pide más estabilidad en el empleo para reforzar los servicios públicos.
Para el secretario regional de UGT, Carlos Pedrosa habrá que esperar a los datos que arroje la Encuesta de Población Activa (EPA) correspondientes al último trimestre de 2016. “Para mí ese es el dato más importante”, explica a eldiarioclm.es. Recuerda que ya el tercer trimestre del pasado año dejó datos de bajada de paro “pero en condiciones de miseria de tal forma que numerosos colectivos y trabajadores que se incorporan al mercado de trabajo lo hacen en condiciones muy precarias. No les permite ni vivir, ya no hablamos de llegar a final de mes. Vamos a ver si la última encuesta del año cambia”.
Pedrosa apunta como “curioso” que, con las actuales cifras de crecimiento económico “en otras épocas se creaba empleo estable y remunerado de forma más o menos digno, y ahora eso no ocurra. No tiene mucho sentido”. En cualquier caso, UGT pide “continuidad y mejora” en los planes especiales de empleo. Por su parte, CCOO apunta a la necesidad de incrementar la inversión en I+D+i e impulsar el desarrollo del sector industrial en la región.
Los empresarios piden más reformas
Mientras, desde el sector empresarial castellano-manchego apuntan que el inicio de recuperación de la economía que se ha producido a lo largo de 2016 se debe a las reformas de carácter estructural acometidas. Apuntan que en este 2017 se producirá una “gradual desaceleración del crecimiento económico a nivel nacional por lo que consideran ”necesario mantener y profundizar“ en dichas reformas (lo han venido pidiendo durante todo el año 2016) así como mantener la ”moderación salarial“ para favorecer la creación de empleo.
¿Recuperar el SEPECAM?
En el año que acaba de terminar también fue noticia la incorporación de 120 profesionales a las 42 oficinas de empleo de la región. El Gobierno socialista recuperaba así una figura suprimida durante la ‘era Cospedal’. ¿Es este el germen para recuperar el antiguo Servicio de Empleo regional, el SEPECAM?
El Pacto por la Recuperación de Castilla-La Mancha incluye “la recuperación y el dimensionamiento” del servicio y que apuesta por su modernización tecnológica pero el vicepresidente de Castilla-La Mancha, José Luis Martínez Guijarro, ha explicado a eldiarioclm.es que no se trata de “recuperar” la figura jurídica del SEPECAM sino de que, quien acuda a las oficinas de empleo, “vaya a recibir orientación y que se trabaje conjuntamente con los desempleados viendo cuáles son sus posibilidades de incorporación, por ejemplo, como autónomos”. Además, se apostará por trabajar también con otras entidades que fomentan el emprendimiento como la propia Universidad de Castilla-La Mancha. “Creemos que hay que colaborar con ellas”, sostiene.
Mientras, fuentes de la Consejería de Economía, Empresas y Empleo aseguran que “las dos grandes prioridades” del departamento siguen siendo “la creación de empleo de calidad, la respuesta a situaciones extremas, en cuanto a los parados de larga duración y el desempleo juvenil, y el fortalecimiento de nuestro tejido empresarial” y, en este sentido, añaden, “no podríamos desarrollar estos objetivos si no contamos con un Servicio Público de Empleo fuerte”.
Carlos Pedrosa señala que UGT no ha mantenido ninguna reunión relacionada con el nuevo modelo para un Servicio Público de Empleo. “Nuestra prioridad no es recuperar el servicio en sí (el antiguo SEPECAM), sino que lo que nos gustaría es empezar a hablar de mejora y recuperación del servicio de orientación laboral y de las políticas activas de empleo así como de dotar de más solidez a los sistemas de formación para el empleo en la Comunidad Autónoma”. En este sentido, hay que recordar que el año 2017 se ha iniciado con el anuncio de la Junta de una inversión de más de 54 millones de euros destinados a mejorar la formación profesional tanto de parados como de ocupados
Mientras, Javier Ortega, de CCOO cree que la contratación de orientadores laborales desde el ámbito público “es un pequeño paso pero para nosotros muy importante” porque como ocurre con todos los servicios públicos “si los dejas sin recursos pierden su utilidad”.