“I believe that clear thinking and clear statement, accuracy and fairness are fundamental to good journalism”.
Walter Williams, 1914.
Degà de la primera escola universitària de periodisme a Columbia Missouri (EUA)
El bloqueo electoral del periodismo en los medios audiovisuales públicos es una anomalía enquistada en el sistema que parece muy difícil de revertir. Durante los quince días que dura la campaña y los dos días de reflexión y de votación, el periodismo político queda en suspenso en las emisoras de radio y de televisión dependientes del Estado, de las comunidades autónomas y de los ayuntamientos. Ahora es para las elecciones municipales, también autonómicas en gran parte de España, después será para las catalanas y para las generales. Este año triple ración.
Son los partidos que dirigen la actividad informativa, de acuerdo con una normativa de la Junta Electoral que no tiene paralelo en las democracias de referencia. Se reparten el tiempo que les corresponde en los informativos de acuerdo con los últimos resultados electorales y, en muchos casos, acaban eligiendo las frases e imágenes que quieren que salgan en los llamados bloques electorales. Son sus noticias, no las que reclama el interés público. Y condicionan la celebración de debates, en los que tienen que estar todos representados y pactan previamente las normas de funcionamiento. Son sus debates, no los que reclama el interés público.
Con los medios públicos condenados a hacer de comparsa, los mismos partidos tratan de obtener bilateralmente el máximo beneficio de su relación privilegiada con los medios privados, aquellos que la tienen. Periódicos, radios y televisiones privadas son el espacio de una información más libre y plural. ¿Del todo?
Con tantos años de intervencionismo partidista y de complicidades editoriales poco disimuladas, la información política habitual no deja de estar bastante compartimentada todo el año. Sin embargo, los medios privados mantienen un margen de maniobra, que actúa en claro detrimento de la credibilidad de los medios públicos. Incluso los partidos que dicen creer en su función les hacen un mal favor, una y otra vez.
Sobre este blog
“I believe that clear thinking and clear statement, accuracy and fairness are fundamental to good journalism”.
Walter Williams, 1914.
Degà de la primera escola universitària de periodisme a Columbia Missouri (EUA)