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Desde comida en casa para mayores hasta apoyo al entorno rural: el lado más social de Guadalajara frente a la pandemia

José Luis Vega FOTO: Diputación de Guadalajara

Teresa Sánchez Garzón

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Frenar la despoblación, era uno de los principales objetivos que se había marcado el presidente de la Diputación de Guadalajara, José Luis Vega para esta legislatura. Una provincia en la que cerca del 80% de sus municipios sufren este problema. Hoy la situación es totalmente distinta a raíz de la pandemia. Cuando se cumplen seis semanas de confinamiento, mucha gente sueña con poder volver a esas localidades, muchas de ellas apenas afectadas por el coronavirus. “Hace dos meses estábamos hablando de la despoblación y ahora todo el mundo quiere ir a los pueblos donde la calidad de vida es mejor. Es una paradoja”.

Sobre esto, y sobre cómo esta afrontando la Diputación el estado de alarma, hablamos con su presidente.

¿En que líneas, desde un punto de vista sanitario, está trabajando la Diputación desde el inicio de la pandemia?

Desde que comenzó la crisis sanitaria, la Diputación provincial lo primero que hizo fue ponerse a disposición del SESCAM para tratar de ayudar en lo que pudiéramos. Por ejemplo, pusimos a disposición de los sanitarios que iban a venir de refuerzo, la residencia de estudiantes para que tuvieran un sitio donde hospedarse.

Fueron unos días muy intensos, en los que los bomberos y las brigadas estuvieron trabajando conjuntamente para ayudar al SESCAM a organizar el despliegue que había hecho para que todas la personas que llegaran al hospital fueran atendidas con la mayor seguridad posible.

A continuación, empezamos a fijar unas líneas para tratar de ayudar a los pueblos de la provincia, principalmente centradas en la desinfección de los municipios, coordinándonos con el Gobierno regional, y luego se fueron implementado en farmacias, cuarteles de la guardia civil y centros médicos.

Además también adquirimos bastante materia sanitario para hacer llegar a los municipios, en primer lugar, a los que tenían viviendas de mayores y los que tenían ayuda a domicilio, y posteriormente se lo hemos hecho llegar a los operarios de servicios múltiples.

¿Qué medidas sociales se han puesto en marcha desde la Diputación?

Paralelamente a las intervenciones que hemos ido realizando en los municipios, me he reunido con entidades sociales y he mantenido conversaciones con Cruz Roja, con Cáritas y con ACCEM, las entidades que más capacidad tienen de llegar a la población en la provincia. En esas reuniones me han hecho llegar las inquietudes que tenían, y en base a ellas, he propuesto una modificación presupuestaria, en este caso, con una partida de 800.000 euros, que gestionará Cáritas y Cruz Roja, basada en ayudas sociales para personas que lo necesiten, es decir, para todo lo que creamos que pueda necesitar la población más vulnerable.

Y en segundo lugar se va a poner en funcionamiento el programa ‘Comida en casa’ ya que todos hemos sido conscientes de que las personas mayores son las más vulnerables. Lo que quiere hacer la Diputación provincial es atender a los mayores y tratar de que les llegue un plato de comida caliente. Es un programa muy bonito, porque por un lado vamos a atender a las personas mayores y por otro lado se pretende crear puestos de trabajo en la zona rural, que ahora mismo está muy afectada. La Diputación va a tratar de poner en marcha este programa a lo largo de este año.

Ademas de para ayudas sociales, la Diputación ha destinado dinero del remanente para autónomos y pymes, ¿Son los colectivos que más le preocupan?

La crisis sanitaria va a marcar un antes y un después. Primero hemos tenido que trabajar duramente para intentar paliar la crisis sanitaria y después llegará una crisis económica. Es evidente que el parón que hemos tenido va a conllevar que la economía frene, y cuando la economía frene los autónomos y pymes van a empezar a tener dificultades económicas. En esa línea hemos mantenido reuniones, con CEOE y con grupos de desarrollo rural, y lo que va a hacer Diputación es poner en marcha una línea de medidas, de más de tres millones y medio de euros para ayudar a autónomos y pequeñas y medianas empresas que se extienden por toda la provincia.

Hay muchas empresas, y sobre todo de turismo y hostelería y se van a ver muy afectadas, y esas líneas van a ir dirigidas, principalmente para los más afectados y posteriormente para la recuperación de los puestos de trabajo.

Otra línea importante es la que vamos a sacar en la próxima Junta de Gobierno. Vamos a aprobar una línea de financiación para ayuntamientos. Esa línea de financiación consta de 600.000 euros y es una ayuda para que los ayuntamientos puedan costearse la compra de EPI, muchos de ellos han ido adquiriéndolos y otros están en proceso, y la Diputación va a estar al lado de ellos. Y en esta modificación llevamos también 300.000 euros para apoyar las labores de desinfección y toda esa maquinaria que han adquirido los ayuntamientos para realizar esas labores.

Lo que ha hecho la Diputación es: ayudar a la sanidad; estar pendiente de los ayuntamientos y estar pendiente de los agentes sociales y de las entidades empresariales. Son las tres patas en las que estamos trabajando.

¿Cuánto dinero se ha destinado desde la Diputación hasta el momento para luchar contra la COVID-19?

En un primer lugar se han movilizado 15 millones de euros, parte de ese dinero ha ido destinado a los ayuntamientos, para que tuvieran liquidez. Por otro lado, se ha retrasado el cobro de todos los impuestos, se habló también con el Servicio de Infraestructuras y Centros Comarcales para que certificaran si alguna obra no estaba terminada, y tratar de hacer llegar dinero a los proveedores. Hemos movilizando una parte importante del presupuesto tratando de hacer llegar liquidez tanto a ayuntamientos como a empresarios.

Por otro lado, ha supuesto un coste importante la residencia de estudiantes, con el mantenimiento de los sanitarios y hemos destinado un millón y medio de euros para la compra de EPI y en este pleno movilizamos más de cinco millones de euros para las medidas a nivel social y empresarial.

La Diputación ha estado movilizando gran cantidad de dinero y va a seguir movilizándolo de aquí en adelante. Cuando pase toda esta crisis sanitaria, la Diputación está dispuesta a preparar otros planes, estamos dispuestos a solventar todos los problemas de esta crisis.

¿Hay alguna localidad que haya tenido poca incidencia?

Esto ha ido en escala. En una primera, muchos alcaldes nos quejamos cuando desde Madrid empezó a desplazarse gente a zonas rurales. Eso hizo que los contagios aumentaran sustancialmente. Estamos muy pegados a Madrid y mucha de la gente que vive en nuestra provincia tiene su segunda residencia en los pueblos de la provincia y esto ha hecho que tengamos más contagiados.

Sin embargo, hay pueblos que no han tenido ningún contagiado especialmente en la zona rural. No es lo mismo vivir en Madrid que en un pequeño municipio donde viven 200 habitantes y donde las distancias de seguridad pueden ser de hasta 200 metros. Es muy diferente la vida en un municipio y paliar el coronavirus en la zona rural es mucho más fácil que en una gran ciudad.

¿Cómo propone que sea la desescalada en la provincia?

Soy de la opinión de que tiene que ser progresiva. En la zona rural perfectamente se podía dejar a la gente salir a las calles porque no hay ningún infectado pero habría que empezar a limitar la movilidad, porque si dejamos salir a las calles y empieza la gente a desplazarse desde las grandes urbes a los municipios vamos a tener problemas en los municipios. Sí se puede empezar dejar salir a la calle a la gente pero hay que evitar los desplazamientos.

Hace dos meses estábamos hablando de la despoblación y ahora todo el mundo quiere ir a esos pueblos donde la calidad de vida y el aire es mejor. Es una paradoja. Se puede hacer un desescalada progresiva pero con unas medidas de seguridad que impidan a la gente desplazarse a las zonas rurales, para evitar contagios.

¿Qué es lo que más le preocupa?

A corto plazo me preocupa que volvamos a tener un rebote de la enfermedad, que tengamos una relajación por parte de la población. A largo plazo me preocupa la crisis económica, todos sabemos cómo ha empezado esta situación pero no sabemos cómo va a terminar y evidentemente no sabemos cuando reactivemos los negocios, cómo va a funcionar la economía.

Tengo programada un segunda ronda de reuniones con empresarios y grupos de desarrollo para ver una segunda batería de ayudas. Pero ahora hay mucha inseguridad, y vamos a ver cómo empieza a evolucionar la economía de España. Y también tengo una certeza, que España siempre ha salido de peores crisis que esta, y de todas hemos salido, y siempre se ha salido con unión.

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