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El edificio La Madreña, símbolo del 15M en Asturias, desalojado el día después de la abdicación del Rey
A las 6:30 de la mañana, la Policía Nacional ha desalojada por la fuerza a seis personas que hacían guardia en el edificio La Madreña, que ha sido durante dos un centro cultural y social autogestionado y representativo, en la ciudad de Oviedo, del espíritu de los distintos movimientos que surgieron del 15M.
El desalojo se ha producido tras finalizar el plazo, dado por el juzgado de Instrucción número 1, para abandonar el centro de forma voluntaria, en cumplimiento del auto de la Audiencia Provincial que ordenó, a mediados de mayo, el desalojo, precinto y clausura de las instalaciones.
Después de casi nueve meses de litigios, la justicia asturiana da la razón a la constructora Sedes, propietaria del viejo edificio que fue sede de la consejería de Sanidad, que, tras comprarlo al Gobierno del Principado, dejo el solar abandonado a raíz de la crisis de la construcción. El objetivo de Sedes era edificar pisos de lujos en una de las zonas más céntricas de la ciudad.
Ante el deterioro de lo que se tenía por un edificio público, movimientos surgidos del 15M lo transformaron en un lugar de encuentro cultural y social para los vecinos de la zona. En dos años, los colectivos de La Madreña repartieron ropa de bebes a familias con escasos recursos económicos, comida, juguetes, libros escolares; se llevaron a cabo conferencias y obras de teatro, y se transformaron salas como centros de estudios universitarios.
La Madreña logró sobrevivir estos años sin subvención pública y se convirtió en un referente para Asturias. El plazo dado para el desalojo había finalizado en la medianoche del 28 al 29 de mayo, pero Delegación de Gobierno decidió hacerlo efectivo el día siguiente a la abdicación del Rey y de la multitudinaria concentración en Oviedo, pidiendo la III República.
En la operación de desalojo, sólo participó la Policía Nacional, ya que los bomberos de Asturias se negaron a colaborar. En un comunicado señalan que “¿es labor de los bomberos contribuir a cerrar y dejar en la calle a colectivos que hacen actividades políticas y solidarias, que organizan actividades infantiles, clases de idiomas, repartos de alimentos y ropa a las víctimas de la crisis? Entre nuestras funciones no figuran los desalojos y sí la de salvar vidas. Como en otros desahucios y desalojos, los bomberos asturianos no nos prestaremos a este juego”.
Mientras la Policía sacaba a los ocupantes, varias personas se concentraron en la calle, entre ellas el concejal de IU en el Ayuntamientos de Oviedo, Roberto Sánchez Ramos, que ha denunciado “la represión policial ejercida por los partidos mayoritarios en un tiempo en el que la ciudadanía está reclamando más espacios democráticos”.
Ramos ha exigido al PSOE y al PP que “escuchen a la gente y no defiendan sólo oscuros intereses económicos, que son los que han motivado toda la indecente operación de los Palacios”. En el Ayuntamiento de Oviedo hay abierta una comisión para aclarar el dinero que las administraciones públicas han perdido en operaciones de construcciones, como el palacio de Congresos del arquitecto Santiago Calatrava.
La ‘operación palacios’ se impulsó en la etapa en que era alcalde del PP en Oviedo, Gabino de Lorenzo, en la actualidad delegado de Gobierno en Asturias, y del ex presidente socialista Vicente Álvarez Areces, que trasladó la sede de consejerías como la de Sanidad al palacio de Calatrava, ahora en manos privadas tras la quiebra de la empresa que lo gestionaba Jovellanos XXI. A cambio, el antiguo edificio fue vendido a la constructora Sedes, entonces participada por el Gobierno, y así adquirir las oficinas en el Calatrava.
La crisis de la construcción, llevó a Sedes a abandonar la parcela y dejar sus proyectos para tiempos mejores. Cuando los distintos movimientos del 15M tomaron el edificio, la antigua sede de Sanidad estaba sin vigilancia y sometida al pillaje. Lo limpiaron y ordenaron y lo convirtieron en una historia de ciudad.
Tras este desalojo, queda pendiente de resolución judicial la demanda interpuesta por Sedes por la vía de lo penal contra cinco activistas de La Madreña, un médico, un historiador, un informático, un funcionario y un actor. La imputación es por haber ocupado un edificio abandonado y transformarlo en un centro cultural y social alternativo.
Por la tarde, una marea humana tomó las calles de Oviedo en una marcha no autorizada para defender La Madreña y protestar contra el desalojo. Escoltada por la Policía, terminó la concentración ante Delegación de Gobierno.