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Dos hombres desaparecieron en el naufragio de una de las pateras que rescató el Aquarius, según MSF

Algunas de las personas rescatadas durante la operación de salvamento que tuvo lugar en la madrugada del pasado domingo 10 de junio. La ONG SOS Méditerranée socorrió a 229 personas, mientras que el resto de migrantes fueron rescatados por la Guardia Costera italiana y barcos mercantes, y después los trasladaron al Aquarius. En total, 629 personas permanecen en el buque operado por SOS Mediterranée y MSF después de que Italia y Malta denegaran el desembarco de la nave en sus puertos. Foto: Karpov / SOS MEDITERRANEE

Desalambre

Médicos Sin Fronteras ha asegurado este viernes que, de acuerdo con testimonios de personas cercanas a bordo del Aquarius, dos hombres jóvenes desaparecieron durante los “críticos” rescates nocturnos que llevaron a cabo el pasado sábado. “Se trataría de un nigeriano y un sudanés”, señala en un mensaje en Twitter MSF, que no ha dado más detalles de los desaparecidos.

Las 629 personas que estuvieron durante más de 48 horas esperando que se les asignara un puerto seguro fueron rescatadas durante la noche del sábado 9 al domingo 10, cuando el buque de SOS Mediterranée y Médicos Sin Fronteras (MSF) llevó a cabo seis operaciones de rescate y transferencia en el lapso de nueve horas, todas bajo las instrucciones de la Coordinación de Rescate Marítimo Italiano (IMRCC), según han explicado desde MSF.

El rescate de dos botes de goma se complicó cuando un bote se rompió en la oscuridad, dejando más de 40 personas en el agua. En total, SOS Mediterranée socorrió a 229 personas de estos barcos. Posteriormente, la IMRCC de Roma solicitó al Aquarius que aceptara la transferencia de un grupo de personas que fueron rescatadas por la Marina italiana y la Guardia Costera el 9 de junio. El barco de la ONG aceptó y recibió finalmente a 400 personas más.

Según explica la tripulación del Aquarius, el Centro de Coordinación de Rescate Marítimo italiano coordinó todas estas acciones “desde el principio y asumió la responsabilidad del rescate de todas estas personas”. Sin embargo, posteriormente el Gobierno italiano se negó a aceptar su desembarco en sus puertos, a pesar de que incluso algunos de los supervivientes habían sido rescatados por buques de la Guardia Costera italiana.

“Pasamos 24 horas en el mar y el bote empezó a llenarse de agua. Estaba muy asustado. Nos caímos al mar. Estaba helado y me quedé completamente desnudo. La gente a mi alrededor intentaba agarrarse a lo que podía. Tuve que luchar para poder coger uno de los chalecos que me tirasteis y al final lograsteis salvarme y llevarme a un médico. Solo puedo decir gracias a cada una de las personas que están en este barco”, señala uno de los migrantes a bordo en un testimonio recogido por Efe.

En la noche de este jueves se realizó una nueva parada en el norte de Cerdeña, donde la Guardia Costera envió nuevos suministros de comida y juegos para los niños. El Aquarius que viaja junto a una nave de la Marina y otra de la Guardia Costera italiana, llegará previsiblemente a Valencia (España) el domingo por la mañana debido al mal tiempo que obligó al cambio de ruta.

Un total de 503 personas han muerto en su intento de cruzar el Mediterráneo central, la ruta más mortífera del mundo, según datos de la Organización Internacional para las Migraciones (OIM). Organismos como Acnur y ONG especializadas han reclamado en numerosas ocasiones a los Gobiernos europeos la puesta en marcha de vías seguras y legales de entrada para evitar que estas personas arriesguen su vida en el mar para llegar a Europa.

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