193.000 vascos viven en municipios que todavía continúan en alerta roja por alta transmisión del coronavirus

Euskadi arranca la semana en alerta naranja de transmisión de la COVID-19, con una tasa de 336 casos por cada 100.000 habitantes en 14 días que se aleja de los 385 con los que se entró al fin de semana. Junto con la jornada de Año Nuevo (302 casos en 24 horas) este lunes es el día con menos positivos de todo 2021 (303 contagios nuevos). Eso sí, el volumen de pruebas realizadas este domingo fue de 6.646, lejos de la capacidad diagnóstica máxima de la Sanidad vasca, y hace más de un mes que no se convoca ningún cribado poblacional, como eran habituales en otros momentos de la pandemia.

La incidencia continúa claramente a la baja -así lo fue la semana pasada- y, de hecho, Gipuzkoa ya ha bajado de nivel naranja a amarillo (menos de 300 de tasa) en la escala de colores para medir la gravedad de la pandemia. La incertidumbre pasa por el incremento de la dispersión de la variante VUI/2020/12/01 detectada en origen en el Reino Unido, que es más contagiosa y que ya ha originado un brote en un gimnasio de Barakaldo. Además, en las dos anteriores ocasiones en que la tasa había caído al entorno de 250 se ha producido un repunte. El R0, en todo caso, sigue estando en parámetros de seguridad. Indica los casos que origina cada infectado y se halla en 0,86, por debajo de 1, aunque es un valor que va creciendo poco a poco en las últimas jornadas.

13 de los 251 municipios, en alerta roja

En el plano local, 13 de los 251 municipios vascos continúan en alerta roja, con una tasa de más de 500 casos y con restricciones adicionales en la práctica deportiva y en cuanto al cierre de locales como los salones de juego. Este lunes se ha sumado a esa lista Valdegovía, en Álava, y se han caído de ella por haber mejorado sus perspectivas epidemiológicas Beremo, Bergara, Gorliz, Lantarón, Lemoiz, Lezama, Plentzia y Zamudio. La relación completa de municipios con el máximo nivel de medidas es la siguiente: Barrika, Berango, Derio, Elgoibar, Getxo, Güeñes, Loiu, Mendaro, Oñati, Santurtzi, Sopela, Urduliz y Valgegovía. Allí viven unas 193.000 personas.

Este sistema ha perdido gran parte de su efectividad luego de que la Justicia anulara el cierre automático de la hostelería al entrar a zona roja. Por el contrario, Amurrio, Deba y Lazkao son el contrapunto, tres municipios de más de 5.000 habitantes con un nivel “óptimo” de incidencia, menos de 60 casos de tasa (color verde). En cuanto a las capitales, están en tres escalones diferentes: Donostia con una tasa de 220, Vitoria 340 y Bilbao 414.

A la vuelta del fin de semana permanecen en la UCI 145 pacientes críticos con COVID-19, el 40,96% de las plazas totales habilitadas. Son 541 los ingresados totales después de un domingo con 27 hospitalizaciones, el número más bajo en dos semanas. Aunque la UCI no se está vaciando a la misma velocidad que las plantas, en 14 días se ha pasado de 727 en los hospitales a un 26% menos. Se puede leer aquí más información sobre la presión asistencial en Euskadi durante las sucesivas fases de la segunda ola. Por otro lado, el 32,4% de los positivos presentan síntomas a la toma de muestras, un medidor que se mantiene bastante estable y que no refleja los casos de quienes desarrollan la enfermedad 'a posteriori'.

En nuestros especiales interactivos, se pueden consultar todos los datos sobre la evolución de la pandemia en Euskadi, sobre los positivos y fallecidos en todas y cada una de las residencias de Álava, Bizkaia y Gipuzkoa y el avance día a día de la campaña de vacunación