Este blog pretende ser la primera ventana a la publicación de los futuros periodistas que ahora se están formando en la Facultad de Ciencias Sociales y de la Comunicación de la UPV/EHU. Son las historias que los propios estudiantes de periodismo proponen a nuestros lectores.
Miguel Ángel Tobías: “El audiovisual es el motor más potente para cambiar la sociedad”
Miguel Ángel Tobías (Barakaldo) ha pasado de ser nutricionista a convertirse en guionista, director, presentador, productor y, en alguna ocasión, en actor. Una experiencia en los Andes le llevó a comprometerse con la concienciación y movilización ciudadana. En 2003 fundó la productora Acca Media Enterprise, donde produce y dirige proyectos audiovisuales de formación, divulgación, educación, y que promuevan valores universales.
¿Qué fue lo que le llevó a iniciar su carrera en el mundo de la comunicación?
Ya desde niño comunicarme era algo que hacía con facilidad y desde siempre comprendí que era un mundo que me apasionaba, así que cuando tuve la oportunidad comencé en ello. Comprendí que a través de la comunicación se puede cambiar la sociedad. Decidí que trabajar en el cine, en la televisión, en la radio o escribir artículos en los periódicos era una forma maravillosa de contribuir a cambiar la sociedad en positivo.
Es doctor en nutrición y comenzó en la televisión como colaborador experto en el programa “Hoy en casa”, con Isabel Preysler, ¿sigue usted sus propios consejos?
Me encanta esta pregunta porque durante todos los años que pasé consulta a los pacientes siempre les decía lo mismo. Para darles ánimo y fuerza en el propio cumplimiento de lo que yo les mandaba les dije que, jamás le iba a decir a un paciente que hiciera algo desde el punto de vista nutricional que yo mismo no hiciera. Así que lógicamente las pautas básicas de alimentación sana las he seguido toda mi vida.
Uno de los programas más destacables en su carrera como director es Españoles por el mundo, ¿cree que ha tenido el éxito que merecía?Españoles por el mundo
Sin ninguna duda. Me costó dos años que TVE comprara el programa porque, como suele pasar muchas veces, los directivos en aquel momento me decían que no lo veían. Después, el tiempo ha demostrado que se equivocaron y que yo tenía razón porque sin duda se ha convertido en uno de los programas de referencia, ya no solo en la televisión en España, sino en muchos otros países del mundo.
Usted siempre dice que el que no arriesga, no gana, ¿qué le llevó a involucrarse en proyectos solidarios, sociales y benéficos?
Darme cuenta de que el audiovisual es el motor más potente para cambiar la sociedad. Entonces comprendí que a mí este medio me había dado una profesión y pensé que tenía que utilizar este medio para intentar mejorar la vida de las personas que, por las circunstancias que sean, tienen una vulnerabilidad mayor. Y me comprometí a rodar cada año un documental de cine social, solidario y benéfico y que me está llevando a rodar por todo el planeta, a contar historias maravillosas que generan conciencia en la sociedad y además promueven valores universales como los derechos humanos, la justicia y la paz.
Además de sus propios proyectos, ha participado recientemente en Cuarto Milenio y en Últimas preguntas, de Cuatro y TVE, respectivamente. Con tanto trabajo, ¿ya saca tiempo para usted y para los suyos?Cuarto Milenio Últimas preguntas,
Lo pienso permanentemente. Yo me fui de casa con 19 años y sabía que era una marcha sin retorno desde el punto de vista geográfico. En realidad, no hay ningún día en el que no tenga presente a toda mi familia y lo que hago es intentar, a pesar de vivir en otro lado y viajar por el mundo, estar en el mayor contacto posible e intentar juntarme con la gente que quiero todas las veces que puedo.
Su última obra maestra lleva el título Rising Nepal, en ella cuenta la historia de seis supervivientes del seísmo de Nepal, ¿se esperaba lo que iba a encontrar allí?Rising Nepal
La verdad es que no. Rodar en cualquier país después de una catástrofe, en este caso de un terremoto, es muy complicado, y mucho más evidentemente cuando el país es pobre. Antes de ir, las comunicaciones son prácticamente imposibles, así que tienes que confiar un poco en la intuición, en la profesionalidad, en la experiencia de lo que ya has hecho antes e ir con los ojos y el corazón muy abiertos para tener la capacidad de descubrir quiénes tienen que ser los protagonistas e ir contando una historia que se va escribiendo sobre la marcha.
¿Cree que mereció la pena?
Infinitamente. Siempre me preguntan qué saco de estos rodajes en estos países y siempre digo que una de las vertientes en las que uno se vuelve impregnado de una experiencia de este tipo es, por un lado la personal, donde indiscutiblemente recibo lecciones maravillosas de estas personas sobre la dignidad, la humildad, el valor, la coherencia y la solidaridad, que a mí como persona me enriquecen increíblemente. A pesar de que estamos en condiciones de rodaje muy duras, que muchas veces nos toca dormir en el suelo, que no sabemos cuándo vamos a poder comer o tener agua, todos estamos allí, agotados pero sintiéndonos súper felices porque somos conscientes de que la experiencia vital y el aprendizaje que nos llevamos es enorme. Luego desde el punto de vista profesional, tú tratas de hacer el trabajo lo mejor posible. Ha sido un reto maravilloso y sin ninguna duda me ha hecho muy feliz.
“No echo de menos actuar, porque en realidad nunca he dejado de hacerlo”. Antes de comenzar a dirigir programas de televisión, documentales y largometrajes era actor, ¿lo echa de menos?
No, no echo de menos actuar, porque en realidad nunca he dejado de hacerlo. Incluso en los documentales se actúa, dependiendo del tipo de historia que voy a contar. En muchos casos yo también me pongo delante de la cámara y eso en definitiva no deja de ser una actuación, porque pones tus conocimientos como actor al servicio de la historia que quieres contar. Ahora voy a estrenar un documental de cine sobre el bullying que se va a titular Gritos de silencio en el que yo estoy también al otro lado de la cámara. Cualquiera que lo vea puede ver cómo, dependiendo de las personas a las que entrevisto y con las que me relaciono, el papel que juego es diferente; hay niños desde 8 años hasta catedráticos de antropología
Durante su carrera como actor participó con numerosas figuras relevantes, ¿recuerda a algún compañero con especial cariño?
Cuando estás haciendo una película o cuando haces una serie de televisión evidentemente se genera un sentimiento de familia durante el tiempo que dura el rodaje. Tengo un recuerdo cariñoso y muy profundo hacia Dunia Ayaso que fue, junto con Félix Sabroso, mi directora en la película El grito en el cielo. Fue un ser humano maravilloso y una gran directora. Y a nivel internacional, lo más espectacular que he podido vivir ha sido rodar con Donald Sutherland, el gran actor americano, con quien rodé una película sobre las brigadas rojas internacionales. Él era el protagonista de la película y hacía de médico y yo era uno de los soldados que había caído herido. Tuve con él unas escenas maravillosas.
¿Cuál diría que ha sido su proyecto más destacable? ¿Por qué?
Es muy difícil, esto es como pedirle a un padre o a una madre que elija a qué hijo quiere más [ríe]. Pero quizá por el impacto hay un proyecto del que nunca nos olvidamos que fue Sueños de Haití, que está rodado días después del terremoto de Haití de hace 6 años, y que al final se convirtió en el único documental que se rodó en el mundo justo los días después del terremoto. Es un proyecto que se ha visto en 150 países debido a la dimensión de la tragedia y que nos impactó y ha impactado mucho a todo el mundo que lo ha podido ver.
Finalmente, ¿cree que sus documentales han cambiado o pueden llegar a cambiar la mentalidad de las personas?
Sin ninguna duda. Después de seis años tenemos miles de cartas, mensajes y emails de personas diciéndome que gracias a alguno de los proyectos han tomado decisiones de hacer algo en su vida para mejorar la de otras personas. Así que no tengo ninguna duda de que esto tiene un efecto multiplicador y que además hay gente que a lo mejor cuando ve una determinada película, por su situación vital, por su edad o por sus posibilidades no hace nada, pero eso es una semilla que se queda plantada y que dentro de unos años germina y lleva a esa persona a tomar una decisión importante en su vida con el fin de hacer algo por los demás.
Sobre este blog
Este blog pretende ser la primera ventana a la publicación de los futuros periodistas que ahora se están formando en la Facultad de Ciencias Sociales y de la Comunicación de la UPV/EHU. Son las historias que los propios estudiantes de periodismo proponen a nuestros lectores.