La crisis de Acorex dejará un agujero de varios millones al nuevo gobierno
Cuando el nuevo gobierno mire facturas tendrá que añadir una cifra importante a los agujeros que deja en herencia la administración Monago: 16 millones de euros es el préstamo que el gobierno saliente puso en manos del grupo cooperativo regional y en la crisis que asola a la entidad esa cifra no será fácil de recuperar a corto plazo.
La petición de un pre concurso de acreedores por parte de Acorex ha puesto en marcha una serie de mecanismo destinados a evitar el embargo de posibles proveedores y al tiempo la dirección actual perfila un plan para solicitar unas quitas muy elevadas, que podrían llegar incluso al 30 ó 40%, según ha podido conocer eldiarioex.
Si ese proyecto sigue adelante, y en el caso de que Sofiex lo aceptara, implicaría que del préstamo de 16 millones que la Junta depositó en un grupo cooperativo regional, perdería entre 5 y 6 millones de euros.
Con una facturación que este año está siendo ridícula y con el aplazamiento de la deuda a costa de futuros beneficios, la situación financiera de Acorex sigue siendo muy delicada y la mano que tiende el grupo navarro AN a las cooperativas extremeñas, con préstamos individualizados, no hace más que retrasar este serio problema financiero.
¿Apoyar a la competencia?
Por otra parte, la rápida integración que se viene produciendo entre cooperativas de Acorex y el grupo navarro está causando perplejidad y también cierto malestar entre otros grupos cooperativos extremeños y empresas privadas del sector.
Entienden estos sectores que esas integraciones van a reforzar a grupos de la competencia y que hubiera sido más sensato abrir primero vía de negociación con cooperativas o empresas de la región. “Para comprar o vender a título individual no hace falta ningún acuerdo con AN ni con nadie, pueden comprar o vender con cualquier empresa de aquí”, señalan las mismas fuentes.
Tampoco a los trabajadores que van quedando en la sede central de Acorex en Mérida les convence este proceso de voladura controlada de Acorex que a medio plazo no necesitaría ni recursos humanos, ni de compra, ni instalaciones centrales del grupo. De hecho ya hay gestiones para buscar algunas naves de almacenamiento en Santa Amalia.
En esta delicada situación, ya se han inscrito 28 voluntarios en el ERE, y entre ellos hay profesionales muy cualificados en el grupo que tienen responsabilidades en sectores claves como frutas y hortalizas, fertilizantes e incluso dentro del comité de empresa.