Los restos de Salvador del Amo, represaliado por el franquismo, ya descansan en el cementerio de Badajoz

El cementerio de San Juan de Badajoz acoge desde este martes los restos de Salvador del Amo Jiménez, fallecido en 1941 en Orduña (Vizcaya), a cuya cárcel fue trasladado junto a su hermano Manuel por su vinculación con la República, y cuyos restos, como los de su hermano han sido identificados recientemente.
Con el acto celebrado en el cementerio pacense, al que han acudido su nieto, Salvador del Amo Seguro, la mujer, hijo e hija de éste, junto a otros familiares, amigos y distintas autoridades, se cierra el círculo desde que los restos de ambos fueran localizados y que culmina con su reposo en Extremadura.
Los restos de Manuel del Amo Jiménez están desde el lunes en el camposanto de Villagonzalo (Badajoz).
Tras este acto, Salvador del Amo Seguro ha relatado a los medios que la historia de su abuelo la conoce gracias a su padre, quien también fue detenido por la dictadura franquista, aunque en este caso fue a parar a Santoña y tuvo la suerte de regresar después a Badajoz.
Salvador del Amo Jiménez, que era de UGT, fue detenido en la primavera de 1939 en Villagonzalo, para después ser trasladado a Mérida, donde le realizaron el Consejo de Guerra, con una condena de 30 años, y Castuera, para posteriormente pasar a Orduña, donde junto a su hermano sufrieron unas condiciones tan infrahumanas que les llevaron a la muerte.
Su nieto, que llegó a Badajoz con 12 años, tiene “razones para pensar” que su familia fue después vigilada “durante mucho tiempo”, aunque curiosidades del destino quien “hizo esa atrocidad” a su abuelo (en referencia a Francisco Franco) le recibió posteriormente en 1965 en El Pardo tras obtener un Premio Nacional de Cerrajería.
Como ha expresado Salvador del Amo Seguro, desde que conoció que su abuelo fue localizado en Euskadi “fue un consuelo para todos” en la familia, aunque en su caso también superar “la asignatura pendiente” de encontrarlo. Por ello, ha agradecido las “facilidades” mostradas por las administraciones vascas, así como el trabajo de investigación realizado.
Desde ese hallazgo, uno de los grandes objetivos era que Salvador del Amo Jiménez, que falleció con 52 años, pudiera descansar en el camposanto donde se encuentra su mujer, Dionisia Donoso, quien murió a su vez por tanto “sin saber donde estaban los restos de su marido”.
El también presidente de la Asociación de Vecinos del Progreso de Badajoz espera que historias como ésta sirvan para “concienciar más a la sociedad” respecto a una etapa que “ahora comienza a descubrirse de forma objetiva”.
En el acto han participado entre otros el delegado del Gobierno en Extremadura, Francisco Mendoza, y el presidente de la Asociación para la Recuperación de la Memoria Histórica de Extremadura (Armhex), José Manuel Corbacho.

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