Análisis de Trainz: A New Era. Sumergirse de lleno en el mundo del ferrocarril

Aunque mucho se nieguen a verlo, los videojuegos no son meros entretenimientos en los que disparar como locos y matar marcianitos. Puede que lo fueran en su momento, pero el paso de los años, el avance de la tecnología y, especialmente, la originalidad de los desarrolladores, han conseguido que la variedad de géneros y juegos disponibles sea abrumadora.

Si somos partidarios de la estrategia y preferimos pensar antes de actuar, tenemos cientos de juegos que nos permiten crear y gestionar, razonar y decidir qué planes seguir. Si preferimos la acción, la adrenalina, reaccionar en el momento y actuar, tenemos shooters y toda clase de títulos enfocados al combate. Si preferimos explorar mundos de fantasía, conocer sus secretos y personalizar al máximo nuestra partida, disponemos de multitud de RPGs. Si por el contrario somos fans de la libertad y preferimos hacer lo que queramos cuando queramos, contamos con una larga lista de sandbox a nuestro alcance.

Y por supuesto, hay cientos de videojuegos que permiten a los usuarios centrarse en su pasión. Juegos de deportes, de conducción, simuladores de construcción... Los amantes del mundo del ferrocarril no son una excepción, desde que, a principios del 2000, nació la saga Trainz, considerada uno de los simuladores de trenes más completos. Desde entonces, trece juegos desarrollados por N3V Games han visto la luz, cada uno más detallista y completo que el anterior.

Hoy, 15 de mayo, los fans de la saga están de enhorabuena. Trainz vuelve a la carga, tras cuatro años en los que las únicas novedades de la saga eran ports a Mac, iPad o iPhone. Trainz: A New Era ya está disponible, después de dos años de desarrollo y de una campaña de financiación en Kickstarter. Se trata de un nuevo renacer de la franquicia, según sus creadores, un juego totalmente nuevo que aprovecha todo el potencial gráfico de hoy día y ofrece miles de opciones a los jugadores. ¿Pero qué pueden esperar los usuarios de este simulador?

Los veteranos de la saga saben de sobra qué nos ofrece la saga, pero haremos un repaso para los recién llegados. En Trainz: A New Era, al igual que en las entregas anteriores, podremos conducir un tren de nuestra elección a través de un paisaje que también decidamos. Dicho así puede sonar simple, pero la variedad de opciones resulta abrumadora en un sentido positivo.

Podemos optar por realizar uno de los recorridos preestablecidos, por ejemplo el de King Cross a Edinburgo, una línea real de 644 km, o la ficticia ruta del Condado de Kickstarter, creada como agradecimiento a los fans que permitieron que el juego viera la luz.

Eso no es todo. Algunas de las rutas están ambientadas en épocas actuales, pero si somos más nostálgicos podemos elegir alguno de los caminos históricos, por ejemplo el del Hinton Division, famoso en los Estados Unidos de la década de los 50, o la ruta Healesville-Australia de 1915. Si preferimos un camino más corto, podemos elegir una línea de tranvía por el interior de una ciudad.

Una vez hemos elegido el escenario, podemos lanzarnos a conducir con alguno de los trenes prefijados, o bien elegir uno a nuestra elección. Podemos optar por un tren de alta velocidad, moderno y de suaves formas, o una locomotora antigua que funcione a base de vapor. Si preferimos un tren de pasajeros también podemos elegirlo, al igual que si queremos ponernos al frente de un transporte comercial, cargado de mercancía.

Las opciones entre las que podemos elegir tampoco terminan ahí. Si queremos que nuestra experiencia sea lo más personalizada posible, también podemos elegir a un conductor para el tren, darle unas órdenes básicas y decidir el tipo de control del vehículo, uno más sencillo para novatos, o uno que recrea al detalle la cabina del conductor. También, incluso, podemos decidir el tiempo atmosférico, si avanzaremos por un paisaje nevado, bajo la lluvia o si el día será soleado.

Mientras conducimos el tren por los magníficos escenarios que nos ofrecen, podemos cambiar cualquiera de las opciones mencionadas anteriormente. Todo está hecho para dar la máxima libertad posible a los jugadores, para no coartar su imaginación y permitirles realizar el recorrido de sus sueños.

Por supuesto, puede que algunos no se sientan cómodos conduciendo un tren de King Cross a Edinburgo y prefieran un recorrido personalizado, libre, en el que puedan decidir cada detalle. Por eso Trainz: A New Era también ofrece la opción de construir nuestra propia ruta, sin duda una de las características más completas del simulador y en la que podemos dar rienda suelta a nuestra imaginación.

Al elegir la opción “Nueva Ruta”, lo primero que se nos pide es un nombre para nuestro recorrido. Podemos elegir la zona geográfica en la que se situará, por ejemplo Francia, y decidir la escala en la que trabajaremos para dar forma al mundo. También se nos permite elegir las unidades de medida en función de si preferimos el sistema métrico o sistema imperial.

Una vez hemos tomado las decisiones básicas, se nos presenta un mapa en blanco, dividido en una cuadricula, y se nos da total libertad. Podemos alterar cualquier aspecto del mapa, como la topografía, decidiendo el nivel de elevación, la inclinación de las pendientes, etc. También podemos crear lagos y ríos que recorran el mapa, y decorarlo con todo tipo de vegetación, desde árboles frutales a grandes setos. También podemos elegir el terreno (hierba, tierra, arena, etc.) o incluso alternarlos a lo largo del recorrido.

Por supuesto, si somos más de conducir por zonas urbanas también nos dan esa posibilidad. Podemos crear nuestras propias ciudades, emplazando cada edificio, túneles, carreteras, señales de tráfico, postes de iluminación, cableado... Incluso coches. En definitiva, todo lo que hace falta para crear una ciudad con todo nivel de detalles.

Eso sí, si preferimos centrarnos únicamente en los trenes, también podemos, situando vías por el mapa y asegurándonos de que estén perfectamente unidas y resulten transitables. Una vez hemos terminado de crear nuestro recorrido soñado, podemos emplazar una locomotora y comprobar si funciona correctamente y con eficiencia, consultando las estadísticas del motor, las vías, etc.

Podríamos estar horas escribiendo sobre las posibilidades de simulación que ofrece Trainz: A New Era, pero eso siempre ha sido algo común en la saga de N3V Games.

Gráficamente, el juego es una delicia, y no es de extrañar ya que ha sido desarrollado empleando su propio motor gráfico, “E2”, que ofrece un realismo superior al que estábamos acostumbrados en anteriores entregas, y que además ayuda a que la densidad de entornos sea más alta. La calidad de las texturas merece ser elogiada, así como las animaciones y el movimiento de los trenes. Y es que ciertamente, si nos acercamos lo suficiente a los vagones, parece como si estuviéramos viendo un tren verdadero sobre raíles.

Lo que brilla por su ausencia es el apartado sonoro, lo cual es una pena ya que algunas melodías bien elegidas podrían haber animado bastante los momentos de mera conducción. Sí, es cierto, escuchamos el ruido del propio tren, el de la lluvia al caer, del viento, etc., pero pueden acabar cansando a medio-largo plazo.

Lo que si debemos resaltar de forma negativa es la fluidez del juego. Incluso probándolo en un ordenador con potencia suficiente para correr de sobra grandes títulos como Grand Theft Auto V, nos hemos encontrado con eternas pantallas de carga que, en algunos casos, incluso obligaban a salir del juego. Otras veces, al alejar la cámara y ver las vías desde una distancia considerable, el juego se bloqueaba literalmente durante minutos. Eso por no hablar de las dificultades a la hora de colocar elementos sobre el escenario, ya que el juego tardaba varios segundos en “aceptar” las órdenes. Problemas que nos han hecho desesperarnos en más de una ocasión.

Por otro lado, el modo multijugador ofrece a los apasionados del mundo de ferrocarril la posibilidad de compartir su afición con otros usuarios, conduciendo sus trenes a través de la misma ruta, permitiéndoles cruzarse y saludarse con la mano, pero aparte de eso, no tiene nada reseñable ni cuestionable.

Lo mejor:

Lo peor:

Conclusiones

ConclusionesAnálisis de Trainz: A New Era. Sumergirse de lleno en el mundo del ferrocarril

Trainz: A New Era es, tal y como dijeron sus creadores, un nuevo renacer de la saga. Buenos gráficos, muchísimas opciones de personalización, nuevas características, etc., pero la base es la misma. La innovación brilla por su ausencia, y parece que sus creadores se han limitado simplemente a poner bonito lo que ya tenían. Eso no es malo en absoluto, y los fans de la saga lo apreciarán sin duda alguna, pero los que esperan grandes novedades o cambios puede que acaben un poco decepcionados.

Además, aunque el juego es bueno, el problema de la fluidez le resta muchísimo atractivo. No hay nada peor que tener que jugar a ratos, esperando entre click y click para ver como tus acciones tienen efectos en la partida. Damos un voto de confianza a los creadores, y esperamos que solucionen pronto estos problemas, ya que si no es así la visión general del juego puede quedar dañada definitivamente y sin remedio.

Por: Álvaro Alonso

Análisis de Trainz: A New Era. Sumergirse de lleno en el mundo del ferrocarril

05/15/2015

7 / 10 estrellas