Más de la mitad de los actuales dirigentes estatales de Podemos no estarán en la dirección tras Vistalegre 2
El 15 de noviembre de 2014 Pablo Iglesias era proclamado secretario general de Podemos. En el Teatro Nuevo Apolo de Madrid ofreció su primer discurso como líder electo del partido. En el escenario, tras él, la mayoría de los 62 miembros del Consejo Ciudadano, el máximo órgano de la organización entre asambleas. Menos de tres años después, más de la mitad de quienes formaron aquella primera dirección estatal no integran ninguna de las listas que se presenta a las primarias de Vistalegre 2. Y los que sí, lo hacen divididos entre la candidatura de Iglesias y la de Íñigo Errejón.
De aquellas 62 personas elegidas en 2014, 34 no repetirán: un 55%. Los motivos son muy variados. El exfiscal Carlos Jiménez Villarejo tuvo una presencia testimonial desde el primer momento por motivos de salud. Su paso por el Parlamento Europeo fue brevísimo y nunca llegó a ocupar su puesto en el CCE. Sin embargo, difícilmente hubiera aguantado estos años. Jiménez Villarejo ha criticado duramente la estrategia de Podemos, sobre todo tras el 20D.
También se bajó pronto del órgano uno de los cofundadores, Juan Carlos Monedero. El politólogo fue el primero de los cinco miembros del llamado equipo promotor que dejó la dirección, por sus diferencias de estrategia con Iglesias y Errejón y por sus problemas con Hacienda.
Estos serán además los únicos que repetirán en las primarias que se celebrarán entre el 4 y el 11 de febrero. Carolina Bescansa y Luis Alegre también han dado un paso al lado.
Los cinco formaban el núcleo duro del Consejo de Coordinación, la ejecutiva del partido. Allí estaba por ejemplo Gemma Ubasart, líder del partido en Catalunya y una de las primeras dirigentes en abandonar el partido del todo por desavenencias políticas. La campaña de las catalanas del 25 de septiembre de 2015 le pasó por encima y dimitió en octubre de ese año.
De ese primer equipo que aglutinó Pablo Iglesias se ha caído también Nacho Álvarez, muy crítico junto con Bescansa con el actual proceso asambleario.
Las prohibiciones a la acumulación de cargos internos que se impondrá en Vistalegre 2 es el motivo para que algunos de los nombres más relevantes en estos primeros años de vida de Podemos no vayan a repetir en el CCE. Es el caso del ex secretario de Organización, Sergio Pascual, quien ha preferido mantenerse en el Consejo Ciudadano Autonómico andaluz. Su breve reaparición en primera línea como miembro del equipo técnico que organiza la II Asamblea Ciudadana no le ha convencido de volver a intentarlo.
Es el mismo caso de Nagua Alba y Eduardo Maura, secretaria general y secretario político respectivamente en Euskadi. Alberto Montero, que lidera el partido en la ciudad de Málaga, y Jesús Montero (Madrid) están en la misma situación. Al igual que el asturiano Xuacu Rodríguez.
Tampoco repiten Laura Casielles ni Jesús Gil, que han dirigido la comunicación del secretario general y del partido respectivamente en este periodo.
En otros los motivos no son tan claros. En estos dos años y medio ha habido consejeros que, simplemente, han ido desapareciendo de la actividad orgánica del partido y su candidatura ha decaído casi sin esfuerzo.
Otros han comenzado responsabilidades en algunas de las instituciones en las que Podemos ha logrado representación e incluso gobernar. Y han optado por centrarse en esa labor. Dos de los casos más destacados son Jaume Asens, primer teniente de alcalde de Ada Colau en Barcelona, o Sarah Bienzobas, que trabaja en el Ayuntamiento de Madrid para la concejalía de Nacho Murgui.
Los que repiten, enfrentados
Los que si intentarán repetir, o al menos integran listas para las primarias que han arrancado este sábado, se dividen entre las dos principales listas. Si la candidatura de 2014 aunaba bajo la etiqueta Claro Que Podemos! a los partidarios de Iglesias y Errejón (entre otras afinidades), en esta ocasión han tenido que elegir.
La lista del todavía secretario general contará con 11 de los actuales consejeros estatales. Un 18%. Esta cifra no cuenta al propio Iglesias, ya que su asiento en el CCE lo tiene por secretario general. Y aunque en las actuales primarias lidera su propia papeleta, lo hace más como fórmula para arrastrar votos hacia sus candidatos que como fórmula para asegurarse la presencia en el órgano: si Pablo Iglesias pierde tiene intención de dar más de un paso atrás.
Entre quienes vuelven a postularse parte del equipo más próximo a Iglesias: Irene Montero, Rafael Mayoral, Juan Manuel del Olmo o Belén Guerra, ente otros.
En el lado contrario, la candidatura de Íñigo Errejón. El que fuera número uno de la lista al CCE de las primarias de 2014 repite puesto, aunque esta vez sin el apoyo de Pablo Iglesias.
Junto a él, otros 14 consejeros estatales integran la lista de Recuperar la Ilusión: un 24% Los nombres más conocidos: la portavoz de Manuela Carmena, Rita Maestre; los diputados Pablo Bustinduy, Segundo González, Ángela Ballester o Raimundo Viejo; la eurodiputada Tania González; los diputados en la Asamblea de Madrid Clara Serra y Eduardo Fernández Rubiño o el responsable de discurso, Jorge Moruno.
FE DE ERRATAS: En una versión anterior de esta información se apuntaba a que en la lista de Pablo Iglesias repetían 13 de los actuales del CCE, cuando en realidad son 12. Pablo Fernández formó parte de la Comisión de Garantías.
