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Más Madrid pide 10 años de cárcel para Luis Medina y 16 para Alberto Luceño por la estafa de las mascarillas

Media Luceño

Pedro Águeda

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La acusación popular que ejerce Más Madrid ha solicitado penas de 10 años de cárcel para Luis Medina y 16 para Alberto Luceño por la estafa al Ayuntamiento de Madrid en el denominado caso mascarillas, así como por otros delitos cometidos a partir de este. El partido pide que declaren como testigos en el juicio el alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, y su primo hermano Carlos, al que los presuntos estafadores accedieron a través de “una situación de privilegio”, según consta en el escrito de acusación, al que ha tenido acceso elDiario.es.

Más Madrid atribuye indiciariamente a Luceño y Medina los delitos de estafa agravada y falsedad en documento mercantil. Al primero de ellos también le acusa de falsedad en documento público –por el carnet falso del CNI que se le incautó– y delito fiscal agravado, mientras que al hijo del Duque de Feria y Naty Abascal le suma el delito de frustración de la ejecución, por intentar desprenderse de su comisión para que no le fuera embargada. 

En el relato de hechos, los abogados de la formación política afirman que en “el peor momento de la pandemia mundial” y actuando “sin el más mínimo escrúpulo”, Luis Medina y Alberto Luceño obtuvieron “indecentes comisiones” con la venta de mascarillas, guantes y test, “aprovechando la imperiosa necesidad que tenía el Ayuntamiento de Madrid de obtener el mayor material sanitario de prevención para hacer frente a la pandemia”. Los acusados “ocultaron” dichas comisiones al Consistorio madrileño, añade el escrito. 

Debido a su pertenencia a la clase alta de la capital, Luis Medina “obtuvo el teléfono de Carlos Martínez Almeida, casualmente primo hermano del alcalde”. Más Madrid asegura que la instrucción no ha permitido “determinar las personas del Ayuntamiento” con las que el primo del alcalde “contactó para facilitar al señor Medina el hilo directo que le permitió en exclusiva acceder a la persona adecuada a la que dirigir su oferta”, en referencia a Elena Collado, a la que el Consistorio había atribuido la responsabilidad de las compras de material sanitario. 

“Estos contactos pusieron a los acusados en una situación de privilegio respecto de otros ciudadanos y empresas, las cuales debían hacer sus ofertas a través del correo general de ofertas al Ayuntamiento de Madrid”, añade.

El escrito de acusación recuerda que Luceño obtuvo 5,1 millones de dólares en comisiones y Medina un millón de dólares. Esas cantidades resultan de haber obtenido comisiones que oscilaron entre el 60% y el 81% dependiendo del producto. En total, el Ayuntamiento pagó más de 11 millones de euros, “un precio desorbitado por un material que en parte era defectuoso”, añade. 

Además, dice la acusación, “el precio del material ofertado [por los presuntos estafadores] ha resultado ser muy superior al que se ofertó por otras empresas del sector, con las que se suscribieron contratos a precios unitarios muy inferiores a los pactados con los investigados”.

Entre la lista de testigos que se suman a Martínez-Almeida y su primo, de los solicitados por Más Madrid, figuran también la citada Elena Collado; la concejala de Hacienda y superior de ésta última, Engracia Hidalgo; la coordinadora general del Ayuntamiento y mano derecha de Almeida, Matilde García Duarte; así como la directora de una elitista universidad de Madrid, María Díaz de la Cebosa, que puso en contacto a Luis Medina con el primo del regidor.

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