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Andalucía multará los bares y locales de ocio abiertos tras registrar cinco fallecidos y 376 contagios por coronavirus

Juan Manuel Moreno, presidente de la Junta de Andalucía.

Daniel Cela

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En las últimas horas, el número de fallecidos por coronavirus en Andalucía se ha incrementado: cuatro muertos en Málaga y uno en Jaén. Hay contabilizados 376 contagios, 72 más que esta mañana, colocando a las administraciones sanitarias en estado de alerta absoluta. “Somos conscientes de que esto puede empeorar en las próximas horas”, ha dicho el presidente de la Junta de Andalucía, Juan Manuel Moreno.

Los dos últimos fallecidos, un paciente de 70 años y otro de 89 años, estaban ingresados con patologías graves en sendos hospitales de Málaga. Hay 93 ingresos de personas contagiadas, 21 en las unidades de cuidados intensivos, se hace seguimiento activo a 256 (la mayoría en sus domicilios) y uno ha sido dado de alta, según datos de la Consejería de Salud. Por provincias, Málaga sigue siendo la zona de mayor contagio, con 159 positivos. Le sigue Sevilla con 52; Granada con 43; Jaén con 38; Córdoba con 35; Cádiz con 29; Almería con 14 y Huelva con seis.

El Gobierno andaluz ha adoptado esta sábado las medidas que ayer anunció pero no llegó a ejecutar, escudándose en que las competencias autonómicas podían pasar a manos del Ejecutivo central una vez declarado el estado de alarma en el país. Lo que ayer eran recomendaciones, a partir del lunes será un imperativo sujeto a sanciones “muy duras” para aquellos que la incumplan: se trata de la orden de cierre de bares, cafeterías y demás establecimientos públicos de ocio y hostelería, además de parques, jardines y playas (donde se levantará la bandera roja de prohibición). Quedarán abiertas las farmacias, los supermercados, tiendas de alimentos, gasolineras, clínicas sanitarias, bancos, estancos, kioscos, peluquerías, tintorerías y papelerías.

La medida que ha anunciado Moreno ya va implícita en el decreto de estado de alarma que ha aprobado este sábado el Consejo de Ministros extraordinario, que entra en vigor este domingo y durará 15 días. El Gobierno de España ha limitado el movimiento de la ciudadanía en todo el país, excepto para estas situaciones: asistencia a centros sanitarios, desplazamiento a trabajo o empresas y retorno al domicilio; asistencia a mayores o personas vulnerables, desplazamiento a entidades financieras o de seguros. Estos movimientos autorizados se harán de forma individual -salvo casos de dependencia o incapacidad-, bien a pie o bien en vehículos particulares. Tanto el presidente Pedro Sánchez como Moreno han mencionado que quienes incumplan las restricciones de movimiento impuestas se exponen a multas económicas (de 600 a 30.000 euros, según contempla la legislación estatal).

La pandemia no remite, al contrario, avanza aumentando las cifras de fallecidos y contagiados: 376 en Andalucía (la mitad en la provincia de Málaga) y cuatro muertos, tres en Málaga y uno en Jaén, todos pacientes de avanzada edad con patologías previas. Ante esta situación, y en paralelo a las indicaciones del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, Moreno, ha convocado este sábado el gabinete de crisis para activar el Plan Territorial de Emergencias de Andalucía y elevar la situación por el coronavirus al nivel 2 de emergencia.

Hasta ahora, la situación de esta comunidad se mantenía en modo de “contención leve”, porque la incidencia de la pandemia aquí no es tan fuerte ni expansiva como en otras regiones. Pero en las últimas horas se ha roto la coordinación entre el Gobierno central y las comunidades, y la Junta de Andalucía ha empezado a anunciar medidas, anticipándose a las decisiones de Sánchez, que hoy ha aplazado la videoconferencia con los presidentes autonómicos hasta el domingo.

“No podemos esperar a que las diferencias entre miembros del Gobierno de España cesen. La situación requiere urgencia y determinación”, ha escrito Moreno en su cuenta de Twitter, a modo de reproche. A las ocho de la tarde, el presidente de la Junta ha comparecido para anunciar la creación del gabinete de crisis, un órgano que nunca se había conformado en Andalucía, integrado por el vicepresidente, los consejeros de Presidencia, Salud y Hacienda. La Junta recomienda a los ciudadanos permanecer en sus casas, aunque el Gobierno central ya ha limitado por decreto el movimiento de la población civil, que estará vigilado y controlado por la Policía y por el Ejército.

El Gobierno de Sánchez ha centralizado el control de la crisis sanitaria, dotando de mayor competencias a cuatro de sus ministerios, pero no ha retirado la capacidad de gestión a las comunidades. De ahí que muchas de las medidas avanzadas hoy por el presidente andaluz ya estén implícitas en el decreto de estado de alarma hecho público en la mañana del sábado por Moncloa. En cuanto al ámbito de decisión de la Junta andaluza, Moreno ha anunciado el cierre parcial de la Administración andaluza: “se limitará al máximo la concentración de trabajadores en sedes administrativas”, pero no se interrumpirá la actividad del funcionariado que depende de la Junta.

También se suspende el cómputo de los plazos del procedimiento administrativo 15 días, quedando un período inhábil hasta el 30 de marzo, y se reducen los horarios de funcionamiento y el espacio habilitado de los metros y autobuses de Andalucía. Se aprueba una moratoria para las caducidades de las ITV durante los próximos 15 días también y la declaración de emergencia para la contratación pública. “La situación es grave e inédita, pero pido calma”, ha dicho Moreno, reconociendo que el golpe de estas medidas en la economía andaluza será “severo”, pero aún no está calculado.

La Junta también está ultimando una orden de confinamiento en los municipios costeros más afectados por el contagio, la mayoría en la Costa del Sol, pero el presidente andaluz no ha avanzado qué pueblos serán aislados.

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