El Gobierno de Aragón avala el 'macrooutlet' de Pikolin sin valorar sus efectos en la zona
El Departamento de Economía del Gobierno de Aragón tramitó en seis días –cuatro, si se descuenta el fin de semana- el informe sobre el complejo Torre Village, con más de 100.000 metros cuadrados de superficie comercial, que una empresa del grupo Pikolin quiere instalar en la antigua fábrica de colchones de la carretera de Logroño tras el traslado de la factoría a Plaza.
El Ayuntamiento de Zaragoza requirió la opinión de la Comunidad sobre los aspectos comerciales del plan urbanístico que está tramitando el 26 de mayo, jueves, y Economía, que disponía de un mes para pronunciarse –o no hacerlo con silencio administrativo positivo-, respondió el 1 de junio, viernes.
Fuentes municipales calificaron de “inaudita” esa celeridad y llamaron la atención sobre el hecho de que no se pronuncia sobre los posibles efectos de su apertura en los pueblos cercanos. “No valora que incidencia tiene sobre los municipios del entorno situar un equipamiento de esta magnitud, parece que incluso delegase esta valoración en el Ayuntamiento de Zaragoza”, señalaron.
La incidencia de la instalación
La Comunidad se limita a señalar que “se tendrá en cuenta la incidencia de la instalación del equipamiento, tanto en el municipio como en los municipios del entorno y su área de influencia”, aunque sin expresar su criterio. En este sentido, recomienda estudiar su afectación al “modelo de ciudad compacta”, la posible “generación de nuevos núcleos de población no previstos” y estudiar los “problemas de movilidad” que puede generar.
Finalmente, indica que cualquier permiso comercial autonómico para establecimientos de más de 2.500 metros cuadrados quedará supeditado a que, previamente, el ayuntamiento le haya concedido todos los permisos.
El outlet prevé acoger comercios con licencias independientes, además de locales de hostelería y de servicios, en una calle longitudinal con plazas en la que solo la quinta parte podrá ser ocupada por grandes superficies comerciales y que conservará la emblemática torre de la actual fábrica. El proyecto contempla 19 espacios con edificaciones que suman 83.000 metros cuadrados, una superficie de venta de 105.000 y 428 plazas de aparcamiento.
La promotora rebaja las previsiones de inversión y de empleo
El eje de la nueva zona comercial será “principalmente” la ropa de saldo, basado en tiendas que ofrezcan “colecciones de otras temporadas con descuentos del 30 % al 70 % y otras tiendas de moda low cost y ultralow cost” que, según sus promotores, “contribuirá al crecimiento del turismo de compras en la ciudad”, ya que el consumidor de este tipo de productos, añaden los informes, “actualmente sale de la Comunidad hacia otros outlet” o compra las prendas por Internet.
Los documentos remitidos al Ayuntamiento por la promotora, Iberebro, reducen notablemente las previsiones de inversión que hasta ahora se habían manejado en el debate político que ha rodeado el proyecto: la inversión de 198,5 millones se queda en 111,1 tras descontar los 87,4 que costará el traslado de la actual factoría a Plaza, mientras que “los 1.509 empleos directos anuales para el periodo 2015-2020” anunciados se reducen notablemente, ya que solo “588 son por el funcionamiento de Torre Village”.
Es decir, que la inversión de 200 millones que el PP y Ciudadanos esgrimen para acusar a Zaragoza en Común de bloquear el proyecto no es tal y la previsión de un millar y medio de empleos, tampoco.