Alex Txikon, hacia el campo 4 del Everest
Alex Txikon comenzó ayer el ataque definitivo a la cumbre del Everest en su empeño de intentar subir la montaña más alta del mundo (8.848 metros), en invierno y sin la ayuda de oxígeno artificial, una gesta no lograda hasta ahora por ninguna persona.
Después de días de fuertes vientos, incluso en el campo base, las condiciones meteorológicas parecen haber mejorado algo, dando una muy pequeña tregua hasta el mañana miércoles, cuando está previsto de nuevo un empeoramiento del tiempo con vientos fuertes en altura, tal y como lo han señalado varios de los meteorólogos de confianza de Alex Txikon, como Vitor Bahia. Ante este panorama, Txikon decidía partir inmediatamente y empezar a subir hacia los campos de altura.
“Ha llegado la hora; Hoy es un día muy especial para nosotros; un día que recordaremos durante mucho tiempo”, ha manifestado el propio Txikon a su equipo de comunicación vía WhatshApp justo antes de su partida. El alpinista vizcaíno ha reconocido que cuenta aún con margen para atacar la cumbre. “Vamos a por el último cartucho”.
Al igual que ya sucediera en las últimas semanas, la expedición (iniciada el pasado 25 de diciembre cuando salieron del aeropuerto de Loiu, en Bizkaia), se ha configurado en dos grupos. El primero, formado por cuatro sherpas (Gesman, Temba, Sanu y Pasang Nurbu) que salía sobre las 05,00 hora en Nepal (cinco horas menos en España).
Por su parte, el propio Alex Txikon junto con su compañero Nuri Sherpa unas seis horas más tarde e inmediatamente después de la visita sorpresa del legendario alpinista Reinhold Messner, de quien recibía a primera hora de la mañana “la energía y el apoyo para lograr esta gesta”.
La estrategia marcada por Alex Txikon se cumplía a media tarde (hora de Nepal) cuando ambos grupos confluían en el C2 (a 6.400 metros de altura) y donde todo el grupo pasó la noche después del tremendo esfuerzo de las horas previas. Cuentan con tienda de campaña y provisiones. El primer equipo -que tuvo que reequipar hasta tres tramos en la complicada Cascada del Hielo del Khumbu que se habían caído por las últimas tormentas en la zona- tardó 13 horas en hacer el recorrido entre el CB y el C2. Por su parte, Alex Txikon tardó poco más de seis horas en el mismo recorrido (ya reequipado) mientras que su compañero de grupo tardó otra hora y media más.
Está madrugada los cinco sherpas y Alex Txikon partían, sin parar, en dirección al C4 (a casi 8.000 metros de altura y ya en el Collado Sur del Everest). “El viento nos ha castigado hoy muy, muy fuerte en la subida; había momentos con velocidades de hasta 60 kilómetros por hora, en los que no podíamos siquiera avanzar” explicaba por teléfono satélite a media tarde.
“Esperamos intentar hacer cumbre el miércoles”, adelantaba Txikon. “Salimos con lo justo, sin sacos de dormir; tenemos la ruta equipada hasta C4”. Txikon ha explicado que la expedición cuenta con tiendas montadas tanto en el C2 (donde en las semanas anteriores dejaron sacos de dormir y un infiernillo), como en el C4. “Pienso en un ataque muy ligero, aunque reconozco que las posibilidades son muy reducidas ya que la climatología no nos ayuda”, explicaba Txikon. “A pesar de que no soy ningún especialista en esta modalidad -continuaba Txikon- somos buenos conocedores de la ruta y aun las fuerzas nos acompañan”.
En el ataque a cima, la idea es apoyarse en Nuri Sherpa (que cuenta con tres ascensiones al Everest) mientras que el resto de Sherpas permanecerán en el C4. Todos los sherpas, incluido Nuri, utilizarán oxígeno embotellado, mientras que Alex Txikon será el único de la expedición que no se apoyará en este gas artificial, que permite compensar la poca concentración del aire y de este gas en altura y evita las congelaciones derivadas de las temperaturas extremas.
Como dato curioso, el propio Alex se refería ayer al contenido de su propia mochila antes de partir del campo base.