La realidad de la mujer en el medio rural de Cantabria: soporta el peso del sector primario sin cotizar por su trabajo

El papel de la mujer en el desarrollo de la sociedad y su empoderamiento y liderazgo es uno de los asuntos más sonados del momento. Sin embargo, en el ámbito rural, como en la ganadería y en la agricultura, las mujeres siguen siendo las grandes olvidadas.

En este sentido, el Palacio de Soñanes de Villacarriedo acogerá este viernes la jornada 'Las mujeres rurales: impulsando su futuro'. Se trata de un encuentro organizado por la Asociación de Familias y Mujeres del Medio Rural (AFAMMER), con la colaboración del Ayuntamiento y financiada por el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación.

Emprendimiento, incorporación y mantenimiento de las mujeres en la actividad económica del medio rural son algunos de los temas que se debatirán en esta mesa redonda que, además, contará con dos charlas a cargo de la enfermera y licenciada en Psicología Carmen Sarabia y de la ganadera María Ángeles Balbas.

Balbás cuenta a eldiario.es que, tradicionalmente, la mujer ha soportado el peso de la ganadería, un sector que juega un papel muy importante en la Comunidad, a pesar de que era el hombre quien figuraba en las listas de empleo. “El medio está bastante masculinizado, porque la Comunidad cuenta aproximadamente con un 75% de hombres dedicándose al sector, frente un 25% de mujeres registradas de forma oficial”, subraya esta ganadera.

Y es que, tal y como asegura la ponente de las jornadas, el trabajo de la mujer existe, pero muchas de ellas no se han unido todavía a la Ley de Titularidad Compartida, “creada con el objetivo de que la mujer trabajadora también pudiese cotizar”. “La ley pretende acabar con esa dependencia injusta que, por sí misma, no permite a la mujer tener los mismos derechos que el hombre en este medio”, explica.

A esta desigualdad de género, acentuada por la dificultad para que las mujeres agricultoras y ganaderas ganen visibilidad a nivel social, se suma la despoblación que están sufriendo los pueblos con el éxodo hacia las zonas más urbanas, una problemática que, según Sarabia, está provocando “una despoblación económica”.

Según esta enfermera, los últimos datos hablan de “una disminución de hombres autónomos y un aumento de mujeres emprendedoras en las ciudades”, por lo que, mediante su charla, pretende ayudar a que siga esta línea también en el mundo rural “impulsando el emprendimiento, por ejemplo, a través de las asociaciones de mujeres”.

Jóvenes agricultoras y ganaderas

Ambas ponentes ven necesario motivar a las jóvenes agricultoras y ganaderas para que continúen manteniendo estas profesiones a pesar de las dificultades. “La vocación es imprescindible”, subraya Salas, pero reconoce que solo con eso no vale, ya que “requieren de una inversión demasiado grande que no se puede solventar con las ayudas del Gobierno”. “Es más fácil cuando se hereda la explotación familiar”, apunta.

Por su parte, Sarabia anima a las adolescentes a permanecer en las zonas rurales y a crear “una red económica”, así como a “estudiar una formación profesional, ya que este tipo de titulaciones pueden reinventar a muchísimas mujeres”. “El gran mensaje que le mando a la mujer es: 'asesórate y piensa que la principal barrera para conseguir lo que quieres esta en tu mente'”, sostiene la enfermera.

En definitiva, terminar con la situación de desigualdad en el medio rural es imprescindible para estas dos activistas que, desde sus intervenciones, pretenden empoderar a la mujer rural compartiendo sus conocimientos sobre la Ley de Titularidad Compartida y políticas de apoyo del Gobierno de Cantabria, así como incubadoras y lanzaderas de empleo, asesoría jurídica y asociaciones de mujeres.