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El escándalo de la anulación del concierto de David Guetta en Santander consuma el desastre en La Campa

El DJ David Guetta durante una de sus actuaciones.

Rubén Alonso

La cancelación del concierto de David Guetta en Santander que se iba a celebrar este sábado consumó el desastre de la Semana Grande en La Campa. Y es que la actuación estrella de la semana estaba llamada a remontar los sucesivos fracasos cosechados en cada jornada, que estuvieron marcadas por las protestas por el estado de las instalaciones, por las bajas asistencias, por los regalos masivos de entradas y por los cambios de fechas y horarios de los conciertos, entre otros incidentes.

Pero lejos de conseguirlo puso la puntilla al festival dejando tiradas a las 10.000 personas que habían comprado su entrada y que ya se encontraban en el recinto esperando a que saltase al escenario el famoso DJ francés. A pesar de que debería haberlo hecho a las 23.30 horas y de los rumores que corrían en redes sociales y de boca en boca, la organización no confirmó la suspensión hasta las 00.15 horas, desatando la indignación entre los presentes.

“Lamentamos comunicar que el concierto que David Guetta tenía previsto ofrecer esta noche se cancela. Problemas técnicos con el avión privado que tenía que traerle a Santander impiden que llegue a tiempo y no va poder estar hoy aquí tal y como estaba previsto”, informaba la empresa UTE La Campa -formada por Delfuego Booking y Heart of Gold- a través de sus canales en las redes sociales.

Posteriormente, el artista difundió un vídeo en el que confirmaba los problemas con el vuelo que le tenía que traer desde Moscú y en el que pedía disculpas por no asistir a la cita, recalcando que vendrá a la capital cántabra “lo más pronto posible”. “Lo siento muchísimo”, señalaba.

Por su parte, la UTE La Campa ha explicado que no se comunicó antes por megafonía que no iba a asistir el popular DJ, a pesar de que ya se sabía que era “imposible” su presencia en el escenario, “por protocolo”.

“La organización estuvo trabajando hasta el último momento para garantizar la presencia del artista. A las 22.00 horas era técnicamente imposible conseguir que volara hasta Santander y llegara a tiempo. El protocolo exige entonces esperar hasta la hora de la actuación, en este caso las 23.30, para que la autoridad competente declare la incomparecencia del artista”, ha indicado -a pesar de que el anuncio se produjo 45 minutos más tarde de la citada hora-, incidiendo en que lo ocurrido fue por “motivos ajenos” a ellos.

Asimismo, ha señalado que anunciará próximamente el procedimiento a seguir con las entradas adquiridas y que valora las posibles acciones pertinentes ante la incomparecencia del artista.

Reacciones

Como consecuencia de este escándalo, las reacciones políticas no se han hecho esperar. El Ayuntamiento de Santander ha anunciado en un comunicado que estudiará las posibles acciones a llevar a cabo y que ha pedido explicaciones a la empresa organizadora, exigiendo “que se garanticen los derechos de los espectadores”. En este sentido, la concejala de Dinamización Social, Lorena Gutiérrez, ha anunciado que se encargará a los servicios jurídicos municipales estudiar las consecuencias administrativas y legales que pudieran derivarse de este incidente.

Por su parte, desde Podemos Santander se ha solicitado al Ayuntamiento que habilite una ventanilla única para atender las reclamaciones de las 10.000 personas afectadas. “Lo que ha ocurrido anoche requiere de una acción inmediata por parte del Ayuntamiento, que no puede permanecer impasible ante una situación que ha afectado a miles de personas y ha dejado por los suelos la imagen de Santander en un momento de tanta visibilidad como es la Semana Grande”, ha añadido esta formación en un comunicado.

Además, el partido morado ha exigido al Consistorio santanderino que publique en su portal de transparencia el contrato del concierto, de modo que las personas afectadas puedan denunciar ante Consumidores los daños y perjuicios ocasionados por la cancelación del evento.

Y es que, según ha asegurado Podemos, muchas personas venían de otros puntos del país a ver la actuación del DJ francés en Santander por lo que, además del coste de la entrada, hay que sumar otros gastos como desplazamientos, alojamiento y manutención.

En este sentido, la secretaria general de Podemos Santander, Lydia Alegría, ha señalado que “esperamos que no existan cláusulas de confidencialidad como ha sucedido en otros conciertos en Cantabria el año pasado -en referencia al de Enrique Iglesias- que evite que la ciudadanía pueda conocer cuánto nos ha costado el evento y, sobre todo, cuándo lo vamos a recuperar”.

Izquierda Unida ha seguido esa misma línea de exigir al Consistorio santanderino que “facilite las reclamaciones” y ha pedido a la alcaldesa, Gema Igual, que “no caiga en la tentación de pensar que se trata de un asunto privado que corresponde exclusivamente a una empresa”.

“La actuación se incluye en la programación de actividades de la Semana Grande de Santander y se hace sobre un espacio público privilegiado, la campa de La Magdalena, que durante esos días queda privatizado y vedado su uso al resto de santanderinos y turistas”, ha subrayado el concejal Miguel Saro.

Asimismo, ha recordado que la empresa responsable de la organización de los conciertos de la campa lo es tras resultar adjudicataria -a través de una UTE- de un proceso convocado desde el Ayuntamiento, que además tiene entre sus socios a otra adjudicataria de instalaciones municipales como es Escenario Santander, y que “a su disposición se ponen recursos públicos” más allá del recinto, como los efectivos policiales, de mantenimiento o bomberos, entre otros.

Por estos motivos, Saro ha animado a las personas perjudicadas a que “defiendan sus derechos como consumidores”, algo que pueden hacer, a su juicio, a través de la Oficina Municipal de Información al Consumidor de la que dispone el Ayuntamiento.

“Santander no puede sumar a su imagen daños como este, que se añade al bochorno de la traducción en Google de su página web turística”, ha recordado el edil, quien además se ha referido a otros eventos frustrados en la ciudad, como el concierto de Enrique Iglesias, en este caso organizado por el Gobierno de Cantabria dentro de la programación del Año Jubilar Lebaniego.

En este sentido, Saro ha planteado a Gema Igual que “tiene la ocasión de no comportarse del mismo modo que lo hicieron entonces los partidos de gobierno autonómico a los que tanto critica”, algo que “está en su mano si no se desentiende ni echa balones fuera defendiendo al artista”, ha concluido.

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