Bronca entre la Plataforma de Dependencia y los trabajadores sociales por “corporativismo”
La lucha de la Plataforma en defensa de la Ley de Dependencia de Castilla-La Mancha por las prestaciones para cuidadores familiares ha provocado esta vez el enfado del colectivo de trabajadores sociales de la región. Un comunicado del colectivo de dependientes y familiares rechazando que sean los trabajadores sociales “los únicos” que decidan sobre las prestaciones económicas, ha llevado al Colegio Oficial que agrupa a estos últimos a acusar a la Plataforma de no ajustarse a la verdad, y a defender la independencia y profesionalidad del gremio en esta comunidad autónoma.
Aunque no es la primera vez que la Plataforma de Dependencia se refiere así a los trabajadores sociales, ha sido en esta ocasión cuando el Colegio Oficial ha decidido pronunciarse. Su defensa parte de un comunicado en el que el colectivo presidido por Aurelia Jiménez reitera su petición de que los familiares participen en la toma de decisión sobre la prestación que desean recibir.
“No admitimos que el trabajador social sea el único que decida lo que es mejor o no para el usuario, máxime cuando en la mayoría de los casos está primando un mal entendido interés corporativo en la defensa de sus puestos de trabajo, por encima de los deseos del interesado. Cómo nos recuerda esta política a la anterior en la que se ponía en entredicho la honorabilidad de los familiares que recibían una prestación para cuidar a su familiar dependiente, muchos de ellos niños con enfermedades muy graves e incurables”, afirma la Plataforma.
Como respuesta, el Colegio de Trabajadores Sociales de Castilla-La Mancha aclara en primer término que este colectivo no es el único que decide en prestaciones pero sí es su propuesta profesional la que se tiene en cuenta para el acceso a los servicios. Critican por ello el tono de la Plataforma y le preguntan si “se les ocurriría poner en duda el criterio técnico de su pediatra o médico de familia o especialista” ante un diagnóstico clínico sobre el tratamiento adecuado para atender una enfermedad o patología. “Creemos que ni se lo plantearían”, añade.
La opinión de familiares “no tiene rigor técnico”
“De lo social todo el mundo opina y en este caso, la opinión de unos padres, por muy basada en el cariño, afecto, amor hacia su hijo dependiente, o al contrario, de unos hijos hacia su madre anciana que precisa ayuda, no tiene el rigor técnico que una profesión formada para analizar globalmente la situación y proponer el recurso más adecuado para garantizar unos cuidados profesionalizados”.
Pero lo que este los trabajadores sociales han considerado más grave es la acusación de actuar con “criterios partidistas”. Consideran que si estuvieran “presionados de alguna forma” la forma más fácil de “evitar problemas” sería proponer que se concediera únicamente la prestación económica para cuidados en el entorno familiar, “que es el único recurso que parece que desea la Plataforma de Dependencia.
Con ello, añaden “infravaloran la atención temprana para niños con discapacidad, los centros ocupacionales, los centros de día, las residencias, los servicios domiciliarios, las ayudas técnicas o los servicios de promoción de la autonomía. Finalmente, defienden el rigor técnico de la profesión y acusan a la Plataforma de poner el foco en prestaciones familiares y no en ”reivindicar el desarrollo de servicios profesionalizados para atender a sus dependientes“. ”Se ha demostrado que la prestación económica no mejora la calidad de vida de la persona dependiente, aunque reconozca monetariamente el esfuerzo del cuidador, el cual nadie discute“, concluye.
