La Diputación de Cuenca no destinará dinero a comedores escolares y lo dedicará a un museo del humor
“Me parece increíble que tengamos dinero para crear un museo del humor y del cómic en Casasimarro y que muchas familias cuyos hijos han empezado el colegio esta semana no tengan dinero ni para comprar los libros”, señalaba Carmen Torralba, portavoz del PSOE en la Diputación de Cuenca. Minutos antes en pleno de la Diputación, el organismo había aprobado la construcción de este centro y dejado sin respuesta la petición de este grupo de destinar alguna partida económica para becas de comedor escolar y de compra de libros de texto, como sí ha hecho la Diputación de Ciudad Real.
Por falta de dinero no es: la institución tiene un superávit en el ejercicio de 2013 de 6'4 millones de euros, conseguido a base de no invertir nada de dinero. Torralba indicaba, respecto al estado de las cuentas, que “es indecente que presuman del superávit cuando los conquenses lo están pasando mal. Dejamos una Diputación que debía sólo 1.200 euros. Este superávit viene de no gastar nada, ni siquiera lo presupuestado en un principio”. Torralba hacía así referencia a la escasa inversión que realiza la Diputación de Cuenca en la provincia.
De los casi 39 millones de euros que se iban a invertir el año pasado en la provincia por parte de la Diputación, al final sólo se invirtieron 9'7. El resto del dinero simplemente nunca salió de las arcas de la Diputación y no se gastó, dinero de donde procede el superávit, simplemente de no gastar. En 2012 la inversión fue de 11 millones de euros. En toda la legislatura la Diputación no ha gastado ni el dinero que tenía sólo para el año pasado.
Dicha actitud no está mal vista pero desde el PSOE se considera que no es lo que se necesita en estos momentos. “Hay que dar soluciones para paliar el sufrimiento de los conquenses y no sacar pecho por el ahorro conseguido. Hay plazos para pagar perfectamente asumibles para la Diputación, ante los problemas que hay no podemos cerrar los ojos y no hacer nada. La ciudadanía nos reclama soluciones y no podemos responderles con que pagaremos la deuda antes de lo previsto”.
El problema de la Diputación de Cuenca es uno de los más extraños ya que lejos de faltar el dinero simplemente no se gasta, luego no hay problema económico respecto a deudas. El organismo está perfectamente saneado y no sólo no debe un euro sino que ha tenido que gastar más porque la Junta ha dejado de invertir en determinados aspectos (como por ejemplo el programa de desarrollo rural que ha costado a la Diputación 2'2 millones de euros cuando de ello se encargaba la Junta). Sin embargo, el presumir de números en una libreta y de cifras macroeconómicas en un mes en el que los padres tienen que asumir tantos gastos y sin ayudas por medio es visto por la oposición de la Diputación como la opción incorrecta a tomar.
