La Junta: la alarma social en Chiloeches la generan “quienes no confían en los técnicos”
El incendio en la planta de reciclado de Chiloeches (Guadalajara) tan solo tres meses después del provocado en el vertedero de neumáticos en Seseña (Toledo) ha provocado que los colectivos ecologistas hayan vuelto a poner en duda la calidad del aire que respiran los ciudadanos debido a la nube tóxica generada. Para el Gobierno de Castilla-La Mancha, esto genera una “alarma social” sin justificación.
Preguntado por el hecho de que estas discrepancias sobre la calidad del aire puedan tener algo que ver con las estaciones de medición, el portavoz de la Junta, Nacho Hernando ha sido tajante: “la alarma social la generan quienes no confían en las labores de los técnicos”. Ha defendido así los trabajos realizados en el terreno, como la construcción de diques para evitar que los residuos tóxicos lleguen al Río Henares o el traslado de unidades móviles de medición, además de las fijas en Azuqueca de Henares y Guadalajara.
“Los resultados de esas mediciones son los que son, la calidad del aire no supone peligro, así que no entiendo el motivo de esas afirmaciones”, ha destacado, precisando asimismo que no se trata de accidentes sino que ambos siniestros se encuentran en investigación judicial para conocer los “verdaderos motivos” de ambos incendios.
Por todo ello, ha considerado fundamental que “lejos de generar alarma social y desconfiar de los técnicos, lo suyo en confiar para que se descubra a los causantes de estos crímenes contra el medio ambiente y que además nos cuestan muchísimo dinero a todos”.
Finalmente, ha explicado como novedad que la extinción del fuego de Chiloeches se encuentra “en estado muy avanzado” y se sigue llevando a cabo la recogida de residuos. Hay 77 efectivos en la zona y las estaciones de medición “no dan datos alarmantes”. “Los diques también están funcionando correctamente y se están retirando los residuos con cisternas”, ha concluido.