La querella Bárcenas como ejemplo de la “metástasis” de la corrupción
Uno de los problemas que ha detectado Izquierda Unida Castilla-La Mancha alrededor de la corrupción es que ya parece “cosustancial” a la sociedad española. “Parece un problema más que tenemos y esto no se puede normalizar”, afirmaba José Ramón Crespo, coordinador regional de la formación de izquierdas quien también tachó la corrupción de un “cáncer” que ya parece metástasis y ha advertido de que las consecuencias las están pagando las clases populares, “nosotros mismos”.
Los abogados de la llamada ‘Querella Bárcenas’, Juan Moreno y Ana Méndez, han participado en Toledo en un acto organizado Izquierda Unida para “refrescar” la memoria a los ciudadanos de lo que ha implicado la corrupción en ciudades como Toledo. Y es que, afirmaba Méndez, la supuesta prevaricación llevada a cabo en la firma del contrato de basuras a la filial Sufi en 2007, habría costado a la ciudadanía unos 7 millones de euros, sin tener en cuenta los 6 millones que se firmaron en un principio.
“Debe haber una concienciación social y ciudadana de las tramas de corrupción que se viven en el Estado español”, explicaba la abogada, que recalcaba las distintas dificultades a las que ha tenido que enfrentarse la acusación popular a la hora de llevar este caso ante los tribunales. Desde la pérdida de autos y la desaparición de los discos duros del PP, las trabas han sido “importantes” pero eso no ha impedido a los profesionales seguir trabajando. Méndez recordó también que el juez Ruz entendió en su momento que existían indicios “más que suficientes” para investigar la supuesta entrega de los 200.000 euros al gerente del PP Castilla-La Mancha, y ha lamentado que la Fiscalía haya pedido hace cerca de un mes el sobreseimiento de la causa, basándose en la huelga y en la celebración del Corpus de ese año.
Para la letrada, la prevaricación está clara. Recuerda así que el contrato con Sufi pasó de significar 6 millones a 17 en unos cuatro meses, tras la firma de un protocolo ante una “supuesta huelga” de los trabajadores. “Lo que a priori parecía ser lo que se llama una mordida se convierte en una irregularidad que constituía un gravamen para el Ayuntamiento de 17 millones. Es suficientemente importante para tener trascendencia”, asegura la letrada.
Además, ha criticado la “pérdida de memoria” de los miembros del equipo de Gobierno municipal que avaló la firma de este protocolo en sus declaraciones como investigados en Toledo. “Justificados en la base de que no tienen formación, de que es el secretario el que daba fe”, recalca la abogada. Sin embargo, tanto Ana Méndez como Juan Moreno han celebrado la reactivación de la investigación: “La corrupción ha dejado a familias enteras en la más absoluta indefensión y eso es lo que nos ha llevado a trabajar en la querella Bárcenas y es por eso también que vamos a seguir”, concluía la abogada.
Cuatro años de la querella
Este pasado 28 de febrero, se cumplieron 4 años de la presentación de la querella Bárcenas, y Juan Moreno ha recalcado que son muchos los procesos actuaciones y también presiones a las que se ha visto sometida la acusación popular. “Por un lado esto nos llena de vitalidad, nos satisface”, aseguraba el abogado que también recordaba, sin embargo, que han quedado implicados en el proceso “en el tintero” como es el caso de los grandes empresarios. Ante esto, ha recordado también que la corrupción parece una “montaña rusa” en la sociedad española, que parece “olvidar” los casos tras un tiempo.
“La corrupción no es una legislatura que pasa y ya, no. Está ligada al Estado y se ha asentado en la sociedad española de forma clara en los últimos 20-25 años, e incluso parece que pasa casi desapercibido. Pero por eso tenemos que seguir denunciando”, aseguró el abogado. Moreno también recordó que las “presiones” que se están recibiendo desde distintos frentes, como el PP, han incluso llegado a influir en los jueces implicados en estas investigaciones. “Vamos a ver cómo los jueces sortean estas presiones, que se van a hacer efectivas”, concluyó.
