El recurso del PSOE al hospital es rechazado por “mezclar poder político con administrativo”

El Tribunal Administrativo Central de Recursos Contractuales ha rechazado, dos días después de hacer lo mismo con el recurso presentado por el taller de arquitectos Sánchez-Horneros, el recurso que presentó previamente el PSOE a la licitación de la obra del nuevo hospital universitario de Toledo y al pliego de condiciones, por lo que el proyecto carece de recursos en su contra y sigue adelante en los plazos además estipulados desde un primer momento por el SESCAM.

Para rechazarlo, el tribunal dependiente del Ministerio de Hacienda considera que en el recurso del Partido Socialista “se confunde el control político con el control de la legalidad en las administraciones públicas”.

“El genérico control político, cuyo objeto es ajeno al control de legalidad y que se encuentra en el ámbito político de la oportunidad, no fundamenta la legitimación para interponer el recurso especial en materia de contratación”, por lo que el tribunal rechaza completamente en todos sus argumentos y puntos el recurso.

Aunque ya ha acabado el plazo de presentación de ofertas, hasta el día 10 como mínimo no puede celebrarse ningún estudio de la única oferta presentada, la de la Unión Temporal de Empresas formadas por Acciona, OHL y una empresa satélite de ACS, ya que en este plazo actual las ofertas presentadas en otras administraciones deben llegar hasta la Junta para poder valorarlas (es un procedimiento estándar que se realiza en toda licitación y simplemente burocrático, más especialmente si cabe en proyectos grandes).

Al estar cumpliéndose los plazos estipulados, se estima que como pronto el hospital podría comenzar su actividad en 2016, teniendo licitados aparte de la obra la gestión de todos los servicios no sanitarios hasta el año 2046, a la empresa que gane el concurso que como sería lógico ganará la única empresa presentada al mismo, una UTE un tanto “extraña” que ha levantado dudas por su poca transparencia así como por sus antecedentes de corrupción en un hospital balear, el de Son Espases. De hecho el director de aquellas obras era Luis Carretero, quien a día de hoy es director del SESCAM, acumulando aún más sospechas de “extrañas coincidencias” entre las empresas y los implicados, estando el presidente de OHL (empresa que también construyó el hospital balear) imputado por la justicia en este caso.