El Ayuntamiento del PP en Segovia cerrará la Escuela-taller de formación gratuita para colectivos vulnerables tras 40 años

El Ayuntamiento de Segovia (el PP en minoría, que llega a acuerdos puntuales con Vox) cerrará la Escuela-taller de formación gratuita para colectivos vulnerables tras 40 años en funcionamiento. Ubicado en la antigua Fábrica de Borra, el Centro Municipal de Formación y Empleo CIESS San Lorenzo, lleva décadas formando a desempleados que viven situaciones de precariedad: parados mayores de 55 años y de larga duración, menores de 30 años sin estudios o con estudios secundarios, víctimas de violencia de género, entre otros. Este año, el equipo de gobierno de José Mazarías ha decidido no solicitar las subvenciones que convocan la Junta de Castilla y León y el Gobierno de España —a través de fondos europeos— porque consideran que es una “competencia impropia” del Ayuntamiento.

El cuarto teniente de alcalde y concejal de Comercio e industria, José Luis Horcajo Llorente, defendió hace unas semanas que no había suficiente demanda para esta Escuela-taller —como se la conoce en Segovia— y atribuyó su mantenimiento a la “nostalgia”. “En su momento tuvieron su sentido, ahora mismo son residuales. Estos pequeños programas, que son buenos, que los hagan entidades privadas y no entidades públicas, porque hacemos competencias impropias”, señaló en el pleno, donde defendió que ahora mismo “cualquiera puede acceder a ciclos formativos”. elDiario.es ha intentado contactar con el concejal, pero el gabinete de prensa ha pedido a esta periodista esperar cuatro días para ser atendida. “Nadie discute que los programas sean válidos, discutimos que los imparta el Ayuntamiento”, aseveró. Si todo continúa como está previsto, la Escuela cerrará en marzo de 2026.

Solo en los programas de formación mixta que subvenciona la Junta de Castilla y León participan más de 130 ayuntamientos, una decena de ONG y fundaciones y varias diputaciones provinciales. La oferta de este tipo de programas oscila entre profesiones tan variadas como ayudantes de cocina, albañiles, auxiliares de enfermería, peones agrícolas o trabajadores de las industrias cárnicas. El año pasado, el Ayuntamiento solicitó los programas de auxiliar sociosanitario en residencias y rehabilitación de viviendas municipales de carácter social, además del programa de orientación para desempleados en otros ámbitos como la costura o la jardinería.

Formación en construcción, sociosanitaria o de arreglos en ropa

La Escuela-taller ha tenido unos 70 alumnos este año. Los profesores del centro reivindican la importancia de su labor. En estos años han ofrecido también formación en comercio, animación sociocultural, energías renovables, capacitación forestal, fontanería, electricista, carpintería, medio ambiente, entre otras. “Nosotros damos otra oportunidad a gente que está desenganchada del sistema laboral: chavales que no han seguido estudiando, personas a las que les faltarían pocos años para poder jubilarse, pero que están en el paro, mujeres que se han separado y se han quedado sin pensión de manutención... Muchos trabajan ahora en ese sector, son autónomos o han seguido estudiando”, resumen los docentes.

Los empleados protestan también porque nadie del Ayuntamiento se haya reunido con ellos para explicarles que no estaban contentos con el funcionamiento del espacio antes de saber que la escuela va a cerrar. “Muchos llevamos más de diez años trabajando y es habitual encontrarte a exalumnos tuyos trabajando en el sector”, relatan.

Además de la “labor social” que consideran que tiene esta escuela, también colaboran en el Ayuntamiento al “incrementar y mejorar el patrimonio de la ciudad”: el programa de construcción ha servido para rehabilitar la Casa Joven, la antigua Cárcel, algunos parques, viviendas sociales... “El 90% del material se compra en Segovia y revierte en la ciudad. Si esa obra la hace una empresa privada no va a tener eso en cuenta”, añade uno de los profesores. Los alumnos de costura han preparado los trajes de la Cabalgada de Reyes, los Gigantes y los Cabezudos, por ejemplo.

A pesar de este trabajo, los docentes consultados por este periódico consideran que el Ayuntamiento no ha promocionado lo suficiente estos programas de formación. Según explican, los potenciales alumnos —que pasan un proceso de selección— tienen que estar apuntados en el Servicio de Empleo (Ecyl) y especificar que quieren acceder a estos programas. “Si se hicieran campaña en los institutos, por ejemplo, vendrían más chicos que quieren empezar a trabajar”, proponen. Dependiendo del nivel de la formación, puede ser para personas que no tengan estudios secundarios, para aquellos que hayan terminado la ESO o incluso el bachillerato. “Esto es algo muy serio.. Somos una institución en Segovia para reinsertar laboralmente a estos colectivos”, reivindican.

La oposición afea la estrategia del PP

Toda la oposición salvo Vox ha cargado contra la estrategia del PP, que no comprenden. La portavoz del Grupo Municipal Socialista, Clara Martín, considera a la escuela “un símbolo de las políticas activas de empleo”. “Su desaparición será consecuencia directa de la falta de gestión y de compromiso político del señor Mazarías y de su equipo de gobierno”, reprocha Martín, que ataca la estrategia del PP de “privatizar las políticas públicas”.

Varios concejales como Noemí Otero (Ciudadanos) y Ángel Galindo (IU), reclamaron hace unas semanas un refuerzo de los programas y se preguntaron qué futuro uso tendrá el edificio, que tiene más de 2.000 metros cuadrados. “Que nos expliquen cuáles son esos usos más versátiles que van a dar al edificio”, protestó Galindo en el pleno. El edil no respondió a esta pregunta. El edil de Podemos, Guillermo San Juan, no descartó que hiciera falta “repensar” la orientación de la Escuela-taller, cuya experiencia acumulada puso en valor.

El concejal de Vox, Alfonso de Ceballos Escalera y Gila, consideró que esta escuela suponía un “gasto ineficiente” y pidió “evaluar los resultados” de estos programas de formación: ver cuántos alumnos terminan, cuántos encuentran trabajo y cuántos lo rechazan una vez concluida la formación.