Has elegido la edición de . Verás las noticias de esta portada en el módulo de ediciones locales de la home de elDiario.es.

“Hace falta formación agronómica y trasladar el lenguaje de calidad del vino al agricultor”

El 'lloro' de la vid en La Mancha

Carmen Bachiller

Castilla-La Mancha posee la mayor concentración de viñedo  del mundo. “Hay  términos municipales que tienen una dedicación a esta actividad del 60, 70 y hasta el 80%. No hacen casi nada más”.  A eso se suma, dice “la peculiaridad de los cultivos en cuanto a condiciones térmicas, edáficas o de potencialidad de calidad de vino” que han propiciado la instalación de grandes empresas en la región con gran proyección. “Se instalan aquí porque encuentran una uva de gran calidad”.

Lo dice Francisco Montero Riquelme, catedrático de Producción Vegetal en la Universidad de Castilla-La Mancha (UCLM) que dirige el curso de verano ‘El viñedo y los sentidos’. Se celebrará entre el 13 y el 14 de junio en Campo de Criptana (Ciudad Real).

Los objetivos pasan por conocer la dimensión socioeconómica e impacto del viñedo sobre el medio rural, aproximarse al potencial cualitativo del viñedo o introducir a los asistentes en la evaluación sensorial del viñedo como paisaje y patrimonio inteligente.

Montero cree que “se ha mejorado en instalaciones, en automatismos, en control, en sanidad… y eso ha generado un cambio en la imagen de calidad de la región” a la que también han contribuido los premios recibidos. Pero existen, dice, asignaturas pendientes que pasan por “la deficiencia en el consumo interno” que es bajo y la enorme producción que obliga a vender mucho a granel y no tanto embotellado. “No se pueden tener los depósitos llenos, los precios bajan y la imagen no es la misma si comparamos el granel con el embotellado”.

La agronomía del viñedo es “mejorable” en Castilla-La Mancha

¿Cómo es la agronomía en el viñedo castellano-manchego? Este catedrático especialista en producción vegetal cree que es “mejorable” en términos de expresión fenólica, aromas, colores, persistencia, de atractivo o equilibrio. “Nos falta y no podemos dedicarle ni más tiempo ni más dinero porque los precios son bajos”.

Pero frente a eso, cree que “el agricultor entiende perfectamente el lenguaje de la calidad. Y si le dices qué tiene que hacer mejor para aumentar el precio de su producción, lo hará”. Se han ido adaptando a las demandas del mercado a lo largo del tiempo. “Ahora se habla de equilibrios sódicos, de acidez, de potasio en el suelo, de materia orgánica”. En su opinión, estas variables que siguen estando en la tierra y que con prácticas agronómicas diferentes pueden incorporarse mejor al vino“.

Formación para “subir peldaños en la consideración de los productos de la región”

“Hace falta formación porque se trata de temas de manejo de la luz en la viña, la poda, las temperaturas o la humedad ambiental. Hay otros parámetros muy importantes para dotar de más calidad al vino y mejor precio. Si ese lenguaje de calidad se lo transmitimos al agricultor, lo hará”.

Es, desde su punto de vista, lo que permitirá a Castilla-La Mancha “subir peldaños en la consideración de nuestros productos”. Aboga por no tener complejos frente a otras referencias vitivinícolas en España porque “a veces se magnifican y en todos los sitios cuecen habas. Las referencias de precios en Rioja o en Ribera son otras pero ellos se lo han trabajado. No es gratuito” y, en este sentido, reclama “ir en esa línea de la diferenciación porque donde hay diferencia hay margen y si hay margen hay ganancia”.

Superar el concepto “productivo” del viñedo

En el curso se hablará también de la ordenación del territorio vitivinícola y del paisaje o de arquitectura vitivinícola, con las intervenciones  de Antonio Brasa, profesor de  Ingeniería Agroforestal, Diego Peris, arquitecto y Ángel Raúl Ruiz, profesor en Geografía Humana. “No tanto en términos de normativas de ordenación y uso vitivinícola, aquí tenemos la problemática de la proximidad a las zonas ZEPA al viñedo y ya tenemos en marcha los planes de gestión, sino desde un planteamiento cultural”. Es decir, hablar del entorno socioeconómico del viñedo “para mejorar sus posibilidades”.

Y es que, se quiere superar el mero concepto “productivo” del viñedo y ampliarlo a cuestiones “de tipo cultural, de tradición, de folklore, gastronomía…”, que primen “sensaciones y experiencias” vinculadas a la cata pero también al paisaje, la estética, la edificación o el diseño de bodegas, de naves o de espacios ligados a la viña. “Queríamos abordar esa faceta que complementa a esa extensísima superficie, más de 450.000 hectáreas de viñedo, en esta región”

Las instalaciones ligadas al viñedo “se han ido adaptando para que el turismo enológico tenga sentido y atractivo” porque “la población se mantiene si existe interés económico”. Aboga por estas fórmulas para reducir la despoblación. “Vamos a generar este tipo de complementos y la difusión es clave” y por eso se hablará  de la ‘Evaluación Sensorial’ del viñedo, en una charla a cargo de José Emilio Pardo, catedrático en Ingeniería Agroforestal.

El curso de verano abordará también este aspecto en la ponencia ‘La proyección actual del vino: redes sociales y Comunicación’, a cargo del periodista de TVE Carlos de la Morena y de Pablo Javier Vizcaíno Alcantud, profesor Asociado de Organización de Empresas de la UCLM.

Cree que todavía falta “proyección” del vino castellano-manchego a través de las redes sociales o los medios de comunicación. “Tenemos un mercado, el de los jóvenes, que no conoce el vino y al que no tienen idea de acercarse”. En su opinión, “tenemos que traer a la universidad el vino, el mosto…Tenemos una economía de enorme dimensión y unos potenciales consumidores que no la ven. No digo que la rechacen, es que la desconocen”.

El relevo generacional

El curso de verano también se fijará en ‘Los Programas de desarrollo rural e incorporación de jóvenes agricultores’ con las intervenciones de José Juan Fernández Zarco, presidente de RECAMDER y  Javier Carmona García, director general de Desarrollo Rural de la Junta hasta el pasado abril y que intervendrá en calidad de miembro del Colegio Oficial de Ingenieros de Montes de Castilla-La Mancha.

“Hay que garantizar el relevo generacional y que esté motivado”. En este sentido, resalta la necesidad de buscar las “vías” que lo faciliten y, de paso, mantengan la población en las áreas rurales.

También serán fundamentales, dice,  los nuevos estudios que se quieren incorporar a la UCLM, Enología por un lado y Biotecnología, por otro. “Nos estamos moviendo para resolver los problemas del sector agrario regional que es enorme. Hablamos de un 25% del PIB, muy alto para una región con una población limitada”.

La UCLM sale de su habitual ámbito académico para celebrar este curso en  Campo de Criptana (Ciudad Real), “un punto neurálgico del viñedo en Castilla-La Mancha y en la que hay una relación muy fluida con la Escuela de Catadores”.

Sus instalaciones se aprovecharán para los talleres de cata que complementan el curso y que se celebrarán tanto el 13 de junio, a cargo de la Cooperativa Virgen de Criptana y el 14 de junio, con la participación del conocido sumiller Custodio López Zamarra.

El curso está dirigido tanto a estudiantes (universitarios, ciclos formativos de grado medio y grado superior de Formación Profesional, etc.), profesionales del sector vitivinícola y cualquier otra persona interesada en la cultura del viñedo y del vino.

stats