Alabajos: el cantautor de las víctimas del metro se pasa a la lucha política
Pau Alabajos i Ferrer (Torrent, Valencia, 1982) ni deja la música ni se pasa a la política. Tras más de 10 años en los escenarios (cuatro discos y decenas de conciertos por todo el mundo jalonan su carrera) traslada su compromiso con la sociedad a la brega diaria en las instituciones: será el candidato de Compromís a la alcaldía de su municipio, con 81.000 habitantes, uno de los más grandes de la Comunitat Valenciana.
“Creo que es el momento de pasar de la acción entre bambalinas a la política diaria para aportar cosas en este momento de emergencia social, cuando los valencianos, y su lengua, cultura e identidad, lo están pasando muy mal”. Alabajos vive de y para la música desde 2003. Milita en Compromís, como independiente, desde 2010, pero su participación en movimientos sociales y la combatividad de sus letras viene de lejos.
Una de sus canciones, Línia 1, del disco Teoria del caos, se ha convertido en el himno oficioso a las víctimas del accidente del metro de Valencia de 2006 en el que murieron 43 personas y otras 47 resultaron heridas. Casi en cada aniversario de la tragedia, Alabajos, en compañía de otro artista, Pablo Monleón, pone voz y música en las concentraciones ciudadanas que “claman contra una injusticia flagrante”. Este es el vídeo de un tema que ha devenido casi en himno.
En Torrent, Alabajos competirá contra la sucesora en la alcaldía de la actual consellera de Educación, María José Catalá, o el socialista Jesús Ros, exalcaldel del municipio. Ambos, cree, “representan una manera mercantilista de entender la ciudad, volcada en la urbanización sin freno y en privatizaciones generales [recogida de basuras, polideportivo, auditorio] que benefician a unos pocos”. Su modelo es, dice, diferente. “hay que poner al ciudadano por delante de todo, con más participación y menos autobombo”.
Música y política en Valencia
Alabajos, con su estilo, es uno de los representantes del boom de música –casi siempre comprometida- en valenciano, aunque él no cree que se haya inventado nada. “La nueva hornada de grupos responde a una tradición (Raimon, Ovidi Montllor) que se ha actualizado con los tiempos y difundido de manera relativamente masiva gracias a las nuevas tecnologías, que abaratan la producción y facilitan la difusión de los discos”.
El momento político, además, ha ayudado, tras lustros de “gobiernos del PP que han sido letales para los valencianos”. Eso habría reforzado el compromiso de bandas como La Gossa Sorda (su cantante, Josep Nadal, aspira a ser diputado por Compromís), los míticos y ya desaparecidos Obrint Pas, Senior o, en otro registro, Los Chikos del Maiz. En cualquier caso, a través de la música o en la política institucional, Alabajos sólo aspira a “continuar la lucha”.
