El Ayuntamiento de Benifaió ya ha quitado las placas franquistas que se reubicaron en el cementerio municipal después de que se retiraran del monumento original en el que estaban instaladas, una exposición pública que levantó ampollas en diferentes sectores, especialmente desde colectivos memorialistas.
El gobierno municipal de Marta Ortiz (PSPV) instaló a finales de 2024 estas placas en la pared de un bloque de nichos que se construyó recientemente. Este hecho fue denunciado por el presidente de una Agrupación de Víctimas del Franquismo, Eduardo Ortuño, que advirtió que se vulneraba la Ley de Memoria Democrática, ya que esta placa franquista tiene la inscripción “Caídos por Dios y por España” y la mención destacada a José Antonio Primo de Rivera, fundador de la Falange, por lo que reclamaba que estas piezas fueran retiradas del espacio público en el que estaban.
Por otra parte, Patricia Canet, presidenta de la asociación memorialista Familiares de la Fosa 146 de Paterna impulsó una denuncia en la Fiscalía que abrió diligencias para investigar el caso.
El concejal de Patrimonio de Benifaió, Xavier Martínez, ha explicado que el ayuntamiento tomó la decisión de forma “provisional” de exponerlas en la pared del bloque de nichos tras consultarse a la Conselleria. Pero tras las críticas recibidas el Ayuntamiento envió un nuevo requerimiento a la Conselleria para que se pronunciara sobre la posible vulneración de la ley, y que concretara más qué se debe hacer con estas placas.
Martínez ha explicado que después de dos meses no se ha recibido ninguna contestación, y que “tras este tiempo prudencial” el gobierno municipal ha decidido retirar las placas del polémico emplazamiento. Además ha explicado que el consistorio preserva en su integridad dichas placas y que ahora se abre una fase para evaluar qué se hará con ellas, siempre con la intención de que, en el momento que puedan ser expuestas al público sea contextualizadas dentro de una explicación de la posguerra y la dictadura franquista.
Por su parte, Matías Alonso, presidente del Grupo Recuperación de la Memoria Histórica de la Comunitat Valenciana y Secretario de Memoria Democrática del PSPV de la provincia de València, también se ha implicado en las conversaciones para dar solución a esta polémica. Alonso reclamaba una “solución dialogada” afirmando que pedir una nueva resolución a la Generalitat era “dejar la solución en manos de una Conselleria hostil”.