La Generalitat lanza el bulo de que en la dana “no hubo preemergencia y ahora sí” para justificar su rápida movilización por el temporal actual
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La vicepresidenta primera del Consell, Susana Camarero, se hizo un lío este lunes —otro— a cuenta de la gestión del Ejecutivo de Carlos Mazón de las emergencias. Cada vez que el Consell actúa de manera razonablemente eficaz ante una situación de emergencia, emerge el contraste con el papel del Gobierno de Mazón el pasado 29 de octubre, día de la catastrófica dana que dejó 229 fallecidos. Pasó el 3 de marzo con las lluvias en Castelló, cuando el conseller de Emergencias, Juan Carlos Valderrama, apenas tardó 30 minutos en enviar el mensaje del Es-Alert desde que la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) activó el aviso rojo (a pesar de que el día de la tragedia a la Generalitat le costó 13 horas). Y volvió a suceder este pasado domingo: tras la activación de la alerta roja y doce horas antes del momento en que la Aemet estimaba que se iban a producir “fuertes lluvias” en València, Emergencias envió el mensaje de alerta a los móviles, que pedía que se buscara refugio en altura en caso de estar en “zona inundable”. Además, la Generalitat también convocó una “reunión de coordinación y seguimiento técnico” con la Delegación del Gobierno y agencias como la Aemet o las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado.
Preguntada por el llamativo contraste con el 29 de octubre, Camarero se escudó en que el día de la tragedia, por la que su excompañera del Consell, Salomé Pradas, figura como investigada, no había “preemergencia”. “Hoy estamos en preemergencia y la reunión que se convoca es para la preemergencia. Una reunión de coordinación y seguimiento de la situación que está trasladando Aemet. Y nada más. Para que no haya confusión. No comparemos con el día 29, que eran situaciones distintas”, afirmó la vicepresidenta.
¿Cuál era exactamente, según la documentación oficial de la Generalitat que consta en la causa de la dana, la situación el pasado 29 de octubre? Y, ¿a qué hora se activaron avisos rojos, situaciones de emergencia y se convocaron reuniones de coordinación? La situación, como confirma un reciente informe de la subdirección general de Emergencias incorporado a la causa, era mucho peor que la descrita por Susana Camarero. Nueve horas antes de que la Generalitat convocara la primera reunión de coordinación ya había una alerta roja y, en la comarca de la Ribera Alta, una situación 1 de emergencia (un escenario mucho peor que la “preemergencia” a la que aludía Camarero).
La Aemet activó a las 7.36 la alerta roja en el litoral sur de la provincia de Valencia. Con el nivel rojo, según el Plan Meteoalerta, “el peligro es extraordinario” y “los bienes y la población vulnerable o en zonas expuestas podrían sufrir impactos muy graves o catastróficos”.
Apenas diez minutos después, a las 7.45, el Centro de Coordinación de Emergencias decretó la situación 1 por inundaciones en la comarca de la Ribera Alta. Según el Plan Especial ante el Riesgo de Inundaciones, se trata de la “situación en la que se han producido inundaciones en zonas localizadas, cuya atención puede quedar asegurada mediante el empleo de los medios y recursos disponibles en las zonas afectadas”.
La reunión de coordinación de la delegada del Gobierno
A pesar de la delicada situación en la comarca de la Ribera Alta, la Generalitat no convocó ninguna reunión de coordinación con la administración estatal, ni siquiera del propio equipo de Emergencias (formado por el entonces secretario autonómico, Emilio Argüeso, y por el director general, Alberto Martín Moratilla). Argüeso, de hecho, siguió con parte de su agenda de la mañana.
Quien sí que anuló su agenda y convocó una reunión de coordinación —a las 9.30— fue la delegada del Gobierno, Pilar Bernabé. A pesar de no ostentar la competencia de la protección civil, que corresponde a la Generalitat, Bernabé reunió prudentemente a las agencias estatales y a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado.
A las 9.41, la Aemet activó el aviso rojo para litoral y el interior norte de la provincia de Valencia. A esa hora, a excepción del interior sur (que estaba en nivel naranja), toda la provincia de Valencia estaba ya con aviso rojo.
A pesar de ello, el entonces secretario autonómico de Emergencias, Emilio Argüeso, se fue a las 11.00 al consejo de administración de la Sociedad Valenciana de Gestión Integral de Servicios de Emergencias (SGISE), de carácter burocrático y ajeno a la dana. Le acompañaba el director general, Alberto Martín Moratilla.
Alertas hidrológicas en el Magro y en el barranco del Poyo
A las 11.45, Emergencias decretó la situación 0 y la alerta hidrológica en el río Magro. El Plan Especial ante el Riesgo de Inundaciones define esa situación, que se activa “cuando los datos meteorológicos e hidrológicos permitan prever la inminencia de inundaciones, con peligro para personas y bienes”.
Camarero dijo este lunes que la situación que se ha vivido 11 meses después de la dana se seguía desde una fase de “preemergencia”. Que es, precisamente, lo que define el Plan de Inundaciones para la situación 0. “Esta situación comporta la alerta hidrológica, que se realiza cuando a través de los datos de la fase de seguimiento de la preemergencia, se detecten lluvias muy fuertes o torrenciales y avenidas que hacen previsible la inundación, en una o varias cuencas, con peligro para personas y bienes”.
La misma alerta hidrológica se decretó por parte del Centro de Coordinación de Emergencias, a las 12.20 del 29 de octubre para el barranco del Poyo. Sin embargo, Pradas y Argüeso tampoco convocaron ninguna reunión de coordinación. La consellera y su alto cargo, actualmente investigados por la jueza instructora de la causa de la dana, se fueron al Centro de Emergencias de l'Eliana a las 12.30 y luego acudieron a Carlet para conocer de primera mano la situación de la localidad.
Situación 2 a las 15.00
La reunión del Centro de Coordinación Operativa Integrado (Cecopi) solo se convocó después de que a partir de las 15.00 se activara la situación 2 por inundaciones en la comarca de la Plana de Utiel-Requena y de que a las 15.30 se solicitara por parte de la Generalitat el despliegue de la Unidad Militar de Emergencias (UME) en esa zona.
La reunión del Cecopi se convocó a las 17.00, nueve horas después de que Aemet activara el nivel rojo en el litoral sur de la provincia y de que Emergencias estableciera la situación 1 en la comarca de la Ribera Alta.
Otra notable diferencia con el 29 de octubre fue que el president Mazón estuvo atento a la situación. El día de la catástrofe mantuvo su agenda de la mañana de actos ajenos a la dana y, luego, se fue a comer al restaurante El Ventorro con la periodista Maribel Vilaplana. Ésta última, según una carta abierta publicada el pasado 5 de septiembre, abandonó el establecimiento entre las 18.30 y las 18.45. Durante el polémico ágape de Mazón en el Ventorro, Utiel se inundó por completo y su Gobierno activó la UME. Mazón, según su última versión de los hechos, llegó al Centro de Coordinación de Emergencias de l'Eliana a las 20.28.
Aunque Camarero evitó confirmar si Mazón estuvo este domingo físicamente en el Palau de la Generalitat, la portavoz del Consell aseguró que “el presidente estuvo atento a la emergencia”.
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