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Catalá rechaza quitar las distinciones a Rita Barberá en València pese a la condena a su mano derecha por corrupción

Operarios del Ayuntamiento de València durante la instalación del cartel del 'Puente de las Flores-Rita Barberá'.

Carlos Navarro Castelló

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El PP y Vox en el Ayuntamiento de València votaron este lunes en contra de la moción presentada por Compromís en la que pedía que se retiraran los honores y distinciones a la exalcaldesa Rita Barberá tras la sentencia firme que el pasado mes de julio condenó al PP local por corrupción en el caso Taula.

En concreto, la sección segunda de la Audiencia Provincial de València condenó a cuatro años y medio de prisión y a nueve de inhabilitación a Alfonso Grau, ex vicealclade de València durante los mandatos de Rita Barberá, por los delitos de malversación de caudales públicos y cohecho en relación a la financiación irregular de las campañas electorales de Rita Barberá en 2007 y 2011. José Salinas, exgerente de la Fundación Turismo Valencia, también fue condenado, mientras María del Carmen García Fuster, ex secretaria del grupo municipal popular, y Juan Eduardo Santón, exresponsable del Centro de Estrategias y Desarrollo , fueron absueltos.

Compromís por València anunció la convocatoria de este pleno extraordinario en julio después de hacerse pública la sentencia y pidió a la actual alcaldesa del PP, María José Catalá, que pida perdón por la corrupción de su partido y retire los honores dedicados a Rita Barberá, en alusión a su declaración como alcaldesa vitalicia, así como su nombre del Puente de las Flores. También exigió a Catalá que trabaje para recuperar todo el dinero robado y que se prohíba contratar con las empresas vinculadas a esta trama de corrupción.

“No hay que ser demasiado astuta para ver lo que todos los valencianos vieron en 2015, que la señora X de la corrupción en València era, precisamente, su alcaldesa: la señora Barberà. Que Rita Barberà no solo era consciente de la corrupción, sino que era coordinadora de la corrupción, a través de su mano derecha Alfonso Grau; administradora de la corrupción, a través de su cuñado José María Corbín; y benefactora de la corrupción, en calidad de candidata a la alcaldía de València” dijo la portavoz valencianista, Papi Robles, en su intervención.

“No hay rebaja del IBI que pague la corrupción de dos décadas de gobierno de su partido. Por eso pedimos que devuelvan hasta el último céntimo hurtado en esta ciudad, que pidan perdón, que retiren los honores a la corrupción y que mantengan la imagen que tanto nos costó rehacer”, exigió Robles.

En la misma línea, la concejala socialista Elisa Valía, manifestó que, tras la sentencia judicial, “nadie duda de que Barberá estaba al frente de ese saqueo” y señaló que el PP tiene la oportunidad de “rectificar” y de “no condenar a València a revivir la época más oscura y corrupta de la etapa democrática”.

Sin embargo no fue así por incomparecencia de los partidos del Gobierno municipal, que eludieron intervenir, pasando la moción directamente a una votación rechazada con los votos de los regidores de PP y Vox. “Hoy se debatía sobre si la demostrada corrupción en esta ciudad tiene que ser objeto de glorias o de censura. Sobre si la corrupción se entiende como un horror o como un honor. Sobre si cerramos las puertas de la muralla a la corrupción o si le ponemos un puente de plata, o de flores. Era un asunto capital. Pero, demostrando su talante democrático, PP y Vox de la mano han eludido el debate político”, lamentó Robles al acabar el pleno, que se hizo coincidir con el debate por estado de la ciudad.

Por su parte, el portavoz municipal del PP, Juan Carlos Caballero, reprochó en el turno final de intervenciones a Compromís y al PSPV que su política sea “embarrar la política e intentar mancharla”, y defendió que no retirarán los honores concedidos a Barberá porque la exalcaldesa “jamás ha estado condenada” y el suyo “es legado de todos los valencianos”.

Caballero pidió a los miembros de la oposición “altura de miras” y que “dejen de hacer el ridículo”, al tiempo que insitió en que no van a “entrar en su juego” ni a retirar los honores concedidos a la exalcaldesa popular.

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