Nueve recetas para un pícnic de verano que son seguras frente al calor, fáciles de preparar y muy ricas

Nos encanta comer en la playa o en la montaña, aprovechar las vacaciones para pasar el día al aire libre. A veces optamos por buscar ese chiringuito que recordamos de la última vez o esa casa de comidas serranas que aún resiste a la despoblación rural. Pero otras, ya sea porque nos sentimos más libres o porque nuestra economía lo agradece, optamos por llevar la nevera a la playa o esa mochila refrigerada a la montaña para improvisar en cualquier momento un pícnic.

Lo importante, antes de pensar qué vamos a preparar, es tener claro lo que no debemos llevar. Y esto pasa por evitar aquellos alimentos que puedan degradarse si no se conservan a temperatura adecuada.

Y además, seguir las recomendaciones que cada año da la Agencia Española de Seguridad Alimentaria y Nutrición como llevar los alimentos en frío, en neveras o mochilas con bloques de frío; lavarse las manos antes de manipular los alimentos; evitar abrir las neveras varias veces a lo largo del día para que no pierdan el frío; colocarlas a la sombra; lavar toda la fruta y la verdura antes de consumirla y no guardar las sobras, podrían estropearse.

Aunque parezca difícil, se pueden preparar platos ricos para un día en la playa o en la montaña. Aquí te damos esas ideas y recetas que harán que tu comida al aire libre sea un éxito:

Aperitivo

Para empezar o para picar puedes optar por una lata de aceitunas rellenas, un variado de vegetales en vinagre, pepinillos o unas banderillas. Son seguros para tomar en cualquier parte ya que la salmuera o el vinagre son conservantes. Llévalos en su propia lata sin abrir en la nevera para que se mantengan frescos.

Gazpachos y sopas frías

Ya sea el típico gazpacho de tomate y pepino o aquellos que incorporan fruta y le dan algún toque refrescante como por ejemplo la sandía o el melón.

Dos recetas que siempre apetecen:

Tritura en la batidora medio kilo de tomates que estén bien rojos pelados y 400 gramos de sandía sin las pepitas, incorpora también dos pepinos, medio pimiento rojo y un diente de ajo. Cuando esté bien pasado, dale el toque de aceite de oliva virgen extra, sal y un toque de vinagre de manzana suave, puedes incluso cambiarlo por unas gotas de lima.

Bate medio kilo de melón sin pepitas y sin piel, añade también un pepino, un diente de ajo, aceite de oliva, sal y un punto de vinagre. Puedes servirlo con dados de melón o con jamón serrano picadito.

Untables de verduras y legumbres

Los untables caseros siempre son una buena idea porque son sanos, resultan fáciles de hacer y son seguros, además puedes combinarlos con verduras naturales u optar por los típicos nachos de bolsa, pan de pita o cualquier otro aperitivo de verduras de la amplia oferta que hay actualmente en el mercado. Todo combina con el típico guacamole o con un hummus.

Se compra mucho ya hecho, pero lo cierto es que es facilísmo hacerlo en casa. Si te lanzas a prepararlo, tritura con tenedor un par de aguacates que estén maduros, mézclalos con uno o dos tomates pelados y cortados en dados muy pequeños, añádele una cebolleta blanca o morada también cortada, ajo picado al gusto (uno o dos, según te guste de fuerte), sal, pimienta, aceite de oliva, un buen chorro de lima y cilantro (o perejil si no te gusta el toque de cilantro) y si te va el picante, un chile o un toque de tabasco bastará. Con esto y unos nachos el pícnic playero será un éxito seguro.

Muy fácil si tienes un bote de judías blancas envasadas. Tritura con la batidora las judías escurridas, un diente de ajo, una cucharada de tahini, sal y un zumo de limón. Para hacerla más untuosa y ligera añade agua muy fría o un cubito de hielo hasta que tenga la textura que te gusta. Así de simple, al servirla ponle algo de aceite de oliva virgen extra e incluso un punto de pimentón dulce o picante por encima. Puedes tomarlo mojando pan de pita o verduras naturales como bastoncitos de zanahoria, palitos de apio o tomatitos cherry.

Platos de verduras

Los platos fríos de verduras se inventaron para el verano: el pisto, la caponata italiana, la alboronía o el asadillo manchego son infalibles para cualquier pícnic.

Esta delicia de tomates y pimientos rojos típico de La Mancha bien vale encender el horno, aunque si no te apetece en plena ola de calor puedes optar por comprar algunos de los que ya venden asados. Los tomates puedes meterlos al horno junto a los pimientos o en su defecto coge unos tomates de pera rojos, ponlos en un recipiente apto para microondas y ásalos unos minutos a temperatura alta. Cuando estén blandos, pélalos y pon la pulpa en una sartén con aceite y una pizca de ajo y déjalos que se hagan 20 minutos hasta que estén bien pasados, añade luego sal y comino en polvo. Déjalo enfriar. En el momento de servir pon la salsa de tomate en el fondo del plato y sobre ellos los pimientos, añade sal al gusto y un chorro de aceite de oliva. Si quieres que sea un plato completo añade en el momento de tomarlo una lata de atún, caballa o melva y a disfrutar el borde del mar.

Este plato italiano es un pisto de berenjenas al que se añaden algunos variantes como aceitunas o alcaparras. Consiste en freír en abundante aceite muy caliente berenjenas con su piel cortada en cubos no muy pequeños. También puedes hacerlas al horno para que tengan menos grasa y el plato esté más ligero.

Mientras rehogamos en una sartén un picado de zanahoria, algo de apio y cebolla. Una vez bien pochado, ponemos tomates naturales pelados y picados, y cuando estén a media cocción incorporamos las berenjenas y las alcaparras. E incluso si te gustan los contrastes, añade un puñado de pasas. Deja que se cocine todo junto, añade la sal y cuando tenga la textura deseada se puede retirar, añadir un chorro de vinagre balsámico y se deja enfriar. El plato es ideal para un pícnic y puede acompañar cualquier otra cosa, incluso simplemente pasta cocida.

Ensaladas

Las reinas del pícnic. Y de todas ellas, las tradicionales de legumbres o las de pasta son un valor seguro.

Mezclamos garbanzos escurridos de bote con cebolleta picada, tomate en dados, pimientos rojo y las variantes que más nos gusten: aceitunas, pepinillos, alcaparras... Aliñamos abundantemente con sal, pimienta, aceite de oliva y vinagre, incluso una punta de mostaza en el aliño le va bien. Cuando sea el momento de comer ponemos una lata de atún que habremos llevado para ello. Ya está, fácil y sano.

No puede faltar una ensalada de pasta. Optaremos por una sin ningún tipo de salsa y con abundantes vegetales. Mezcla pasta corta cocida con judías verdes planas de bote también escurridas, añade tomate en dados y aceitunas negras. Aliña con aceite de oliva, vinagre de vino, pimienta negra, sal y abundante albahaca. En el momento de servir, ponle una lata de atún en aceite, mezcla y a comer.

Postres

Lo más sano, fácil y seguro para llevar a una comida fuera de casa es la fruta fresca, pero cuidado, nunca cortada, lleva la fruta entera sin pelar y bien lavada antes de salir de casa. Un sandía o melón, un puñado de cerezas o unos melocotones, todo bien lavado en casa y conservado en fresco es un postre o un tentempié que no tiene rival.