Piyaz: así se prepara la ensalada turca de alubias que es la receta más fácil, rápida y saludable para el verano
Cuando lo último que apetece es pasar tiempo frente a los fogones, las ensaladas se convierten en las grandes aliadas durante el verano. Pero más allá de la clásica ensalada mixta o la de pasta, existen recetas tradicionales de otras culturas que merecen un lugar destacado en nuestro recetario estival. Una de ellas es el piyaz, una ensalada turca de alubias blancas que destaca por su sencillez, sabor y valor nutricional.
Con ingredientes básicos, sin necesidad de cocinar —si usas legumbres ya cocidas— y lista en apenas unos minutos, esta ensalada es una opción fresca, saciante y perfecta tanto para quienes buscan comer saludable como para quienes simplemente quieren algo rico y diferente.
Un clásico turco con raíces
El piyaz es una ensalada que forma parte de la cocina otomana desde hace siglos. Aunque sus ingredientes —alubias blancas, cebolla, tomate y perejil— podrían encontrarse en muchas cocinas del mundo, la forma de combinarlos, aliñarlos y presentarlos hace del piyaz un plato único.
En Turquía se consume como guarnición, como entrante e, incluso, como plato principal. El piyaz es habitual encontrarlo acompañado de carnes a la parrilla, pero también se puede servir solo como plato único. En las regiones del sur del país, como Antalya, se le añade un toque especial: una salsa cremosa a base de tahini y vinagre que le da un punto extra de sabor.
Saludable, saciante y muy nutritiva
Además de deliciosa, la ensalada piyaz es una opción altamente nutritiva. De acuerdo con la Fundación Española de la Nutrición, las alubias blancas son una excelente fuente de proteínas vegetales, fibra, hierro y potasio, lo que las convierte en un alimento saciante y beneficioso para la salud. Al combinar las legumbres con vegetales frescos y un aliño de calidad, se obtiene como resultado una ensalada completa.
La versión con tahini, por su parte, añade calcio y antioxidantes. Así, si se incorpora tahini, se potencia aún más el perfil nutricional del plato. Por ello, el piyaz es apto para dietas vegetarianas y veganas, así como para personas que buscan reducir el consumo de carne sin perder valor proteico.
Cómo preparar el piyaz paso a paso
Ya sea como entrante en una comida al aire libre, como plato único en una cena ligera o como acompañamiento de una barbacoa, el piyaz no defrauda. Y lo mejor es que se prepara en menos de 15 minutos, sin necesidad de encender los fogones, y con ingredientes al alcance de cualquiera.
Uno de los grandes atractivos del piyaz es, precisamente, este, que se elabora con ingredientes básicos y económicos. Para prepararlo, se necesita:
- 600 gramos de alubias blancas cocidas: pueden ser caseras, cocidas a fuego lento, o de bote para ahorrar tiempo. Lo importante es que estén bien tiernas, pero sin deshacerse
- Una cebolla morada: cortada en juliana fina
- Un tomate: cortado en dados pequeños
- Perejil fresco: picado finamente
- Zumo de limón y vinagre de vino blanco
- Aceite de oliva virgen extra
- Sal y pimienta al gusto
Como añadido, para quienes deseen experimentar una versión más auténtica o compleja, se puede incorporar tahini a la vinagreta. Una vez tengas los ingredientes, solo queda ponerse manos a la obra. La elaboración del piyaz es muy sencilla. Basta con seguir estos pasos:
- Primero hay que preparar las alubias. Si se parte de alubias sin cocinar, es necesario ponerlas en remojo la noche anterior y cocerlas con cuidado hasta que estén tiernas pero enteras. Si se utilizan alubias en conserva, solo hay que escurrirlas y enjuagarlas bien.
- A continuación, corta la cebolla en tiras finas y deja reposar unos minutos en agua con un chorrito de vinagre o sal. Este truco suaviza su sabor y mejora la digestión. También corta el tomate en dados pequeños y pica el perejil.
- Para preparar el aliño, en un bol, mezcla el zumo de limón, el vinagre, un buen chorro de aceite de oliva, sal y pimienta. Si prefieres hacer la versión con tahini, añade una cucharada de tahini, un poco de agua y ajo al gusto, y emulsiona.
- Ahora mezcla todos los ingredientes en una ensaladera grande, vierte el aliño y remueve con cuidado para que las alubias no se rompan. Deja reposar unos minutos para que los sabores se integren bien.
- El piyaz lo puedes servir a temperatura ambiente o ligeramente frío.
Versátil y adaptable
Otra de las virtudes del piyaz es su capacidad para adaptarse a diferentes gustos y situaciones. Aunque la receta tradicional es muy concreta, nada impide introducir variaciones según la despensa o la creatividad del cocinero. Algunas ideas pueden ser:
- Añadir huevo duro troceado para hacerlo un plato más proteico.
- Incorporar aceitunas negras, muy comunes en la cocina turca.
- Sustituir el tomate por pepino, para una versión más fresca.
- Usar cilantro en lugar de perejil, si prefieres un toque más exótico.
- Agregar una pizca de comino molido para un sabor más especiado.
Además, el piyaz se conserva muy bien en la nevera durante dos o tres días, lo que lo convierte en una opción perfecta para cocinar una buena cantidad el domingo y disfrutarlo en varias comidas a lo largo de la semana.
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