Alicante también se la juega en el Congreso, las claves de la disputa

Las comarcas de Alicante se la juegan en el Congreso y el Congreso se la juega con las comarcas de Alicante. Su peso en la cámara baja, con 12 escaños, sitúa a esta circunscripción cuarta del territorio nacional tras Madrid (37), Barcelona (32), y Valencia (15) –y a la misma altura que Sevilla-, por lo que los partidos políticos volverán a dejarse ver por estas tierras.

Será sobre todo el sábado 20 cuando coincidan en Alicante el candidato socialista Pedro Sánchez, el presidenciable por el Partido Popular Pablo Casado, el aspirante por Málaga de Unidas Podemos Alberto Garzón –Irene Montero irá el jueves 18 a Elche-, la lideresa de Compromís Mónica Oltra para respaldar al cabeza de cartel Ignasi Candela y presumiblemente también aparecerá Albert Rivera de Ciudadanos. Al ‘supersábado’ electoral le seguirá el domingo de Resurrección con la presencia confirmada del candidato de Vox Santiago Abascal.

Con el inicio el pasado viernes de la que va a ser la campaña más determinante de los últimos años, el electorado alicantino sin embargo, está siendo otra vez testigo de la guerra del agua por la política de trasvases; o de las eternas promesas para paliar la infrafinanciación que padece la provincia y que se traduce en un déficit inversor en materia de infraestructuras: sigue sin llegar la mejora del tren de cercanías Murcia-Alicante o la del Tren de la Costa, la liberalización de la AP7 o la conexión con el aeropuerto Alicante-Elche son algunos ejemplos, incluidos una parte de ellos en los Presupuestos Generales elaborados para este año y tumbados por la oposición.

Discursos sempiternos para candidatos renovados. Y es que casi todas las formaciones han optado en Alicante por hacer borrón y cuenta nueva en las caras visibles de sus aspirantes al Congreso.

Partido Popular

El Partido Popular perderá, si se confirman todas las encuestas, la hegemonía que arrastraba en esta circunscripción desde 1993. De los cinco diputados cosechados en 2016 con José Manuel García-Margallo al frente podrían verse reducidos a tres o incluso dos, según el último sondeo del CIS.

Para frenar la supuesta sangría, el partido de Pablo Casado ha optado por colocar como número uno al presidente de la Diputación de Alicante. César Sánchez ha logrado erigirse como líder de la candidatura gracias a un discurso combativo contra el Consell, con recursos incluidos como el presentado por el decreto de plurilingüismo, por equiparar al gobierno del Botànic con el independentismo catalán.

PSOE

Los socialistas han apostado por un valor mediático para la provincia con el ministro de Ciencia Pedro Duque. Para colocar a este astronauta madrileño como ‘paracaidista’ por esta circunscripción, el equipo de Sánchez ha seguido la estela de Margallo, quien argumentó que disponer de una segunda vivienda en Xàbia le permitía ser candidato en los anteriores comicios.

Aunque el chalé de Duque precisamente en esta localidad al norte de la provincia le ha traído algún quebradero de cabeza cuando fue acusado de crear una sociedad para pagar menos impuestos -si bien luego él defendió con un informe que dicha sociedad en realidad le obligó a pagar más impuestos- el ingeniero aeronáutico lleva semanas estando muy activo en su faceta de político por toda la provincia y los socialistas confían en doblar los resultados de 2016, cuando lograron dos escaños, e incluso aspirar al diputado número cinco de la lista.

Unidas Podemos

Un optimismo el del PSOE que contrasta con el pesimismo que envuelve a Unidas Podemos, candidatura que se presenta por primera vez sin Compromís y que tiene al madrileño Txema Guijarro como cabeza de cartel en sustitución de Rita Bosaho, número tres, tras el proceso de primarias.

De nuevo un cunero para Alicante aunque desde el entorno de Guijarro recuerdan que este licenciado en Economía, exasesor del gobierno de Rafael Correa en Ecuador, ya concurrió en esta circunscripción en 2016 –en 2015 lo hizo por Valencia-. Entonces logró ser diputado al arrebatar por sólo cinco mil votos el tercer escaño al PSOE. Ahora, con la fórmula Podemos e Izquierda Unida van a luchar por retener dos o incluso un único parlamentario, sin embargo insisten en replicar que el resultado electoral siempre les ha sido más favorable que las encuestas.

Compromís

La coalición ya dejó entrever en 2016 que la suma con Podemos e IU había llegado a su fin cuando decidieron que sus cuatro diputados pasaran al Grupo Mixto, por lo que ahora han emprendido el camino en solitario. Una travesía arriesgada puesto que podría dejar a su cabeza de cartel, el crevillentino Ignasi Candela, fuera del parlamento.

Una incógnita que no desvelan las encuestas. Algunas dan por seguro la continuidad de Candela, otras como el CIS, con un 40% de indecisos, no le atribuye ningún escaño a Compromís en Alicante. El partido de Mónica Oltra confía en que al final se valore el trabajo que ha venido realizando su grupo en la cámara baja en general, y el protagonizado por Candela en particular, convertido en el diputado valenciano con más propuestas presentadas -Rita Bosaho ha sido la que menos-.

Ciudadanos

Los ánimos no andan mejor para Ciudadanos. El adelanto electoral y la irrupción de Vox, al que el CIS otorga hasta dos diputados en Alicante, podrían hacer tambalear sus actuales dos diputados. De momento, el partido sigue confiando en una remontada en la campaña, en aspirar incluso a tres escaños, y presentarse con los avales que ostenta la cabeza de cartel, por tercera vez, Marta Martín.

Catedrática de Comunicación Audiovisual y Publicidad en la Universidad de Alicante, perteneció a UPyD donde estrechó lazos con Toni Cantó, actual candidato al Consell por el partido naranja. Su irrupción en Ciudadanos la situaron como portavoz adjunta en el Congreso tras los comicios de 2015 pero su ascenso meteórico, en las siguientes elecciones, se enfrió y finalmente ha ostentado la portavocía de la comisión de Educación y la adjunta de Igualdad.