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El alcalde de Crevillent (PP), contrario a la de la religión islámica en los colegios: “ya tenemos una mezquita donde se enseña”

César Augusto Asencio (PP), alcalde de Crevillent

Emilio J. Salazar

Valencia —

“En Crevillent no tiene sentido que se imparta en los colegios la religión islámica porque la población magrebí, que es numerosa, ya tiene una mezquita y un centro cívico islámico donde se imparte”. De esta manera, el alcalde de la localidad del Baix Vinalopó, César Augusto Asencio, se ha posicionado en contra del anuncio de la Conselleria de Educación, cuyo titular, Vicent Marzà, avanzó la semana pasada que están estudiando introducir en varios colegios de Crevillent y Almoradí esta asignatura.

El político del PP recuerda en un comunicado que el consistorio que dirige viene autorizando “con total normalidad en espacios públicos, como en el Parc Nou, actividades públicas de oración”. Pero considera que “no es comprensible” destinar recursos “para crear una nueva línea de enseñanza religiosa islámica” al mismo tiempo que “se dificulte a los profesores de religión católica la adjudicación de plazas, obligándoles a itinerancias en otros colegios hasta completar horarios mínimos, en lugar de garantizar la presencia del profesor por colegio si hay demanda”. Asimismo, también lamenta que “se intenten cerrar los colegios concertados católicos ahogándolos, obligando a los alumnos a matricularse en colegios públicos mientras haya plazas públicas no cubiertas, e impidiendo su libertad de elección a matricularse en colegios católicos y en definitiva, intentando reducir los conciertos educativos”.

Asencio entiende que esta novedad de Marzà “no se entiende” cuando “hay otros problemas y necesidades que necesitan en educación recursos económicos y de gestión, como la eliminación de barracones, resolver el problema de los interinos, el conflicto al promocionar el valenciano a costa de perseguir al castellano, cuando eso se resuelve admitiendo la libertad de elección de los padres con el anterior sistema de líneas”.r

A este respecto, el primer edil carga contra la Conselleria por “la falta de explicaciones” que han dado sobre este tema. “No han contado con nadie, y no existe demanda alguna de los padres de los centros educativos afectados por esta medida que es un requisito previo para la implantación. Ha sido de nuevo pura imposición”, añade el concejal de Educación Miguel Ángel Sánchez.

Por su parte, la alcaldesa de Almoradí, la popular María Gómez, también ha criticado duramente a la Conselleria de Educación en una línea similar a su homólogo de Crevillent. Según la regidora, ninguno de los cuatro centros de enseñanza de la localidad ha solicitado que se imparta la religión islámica. Entiende que el gobierno valenciano podría resolver antes la eliminación de los barracones que introducir esta asignatura.

Las manifestaciones los alcaldes populares de la provincia llegan después del posicionamiento realizado por el PP de Alicante, cuya vicesecretaria de Políticas Sociales, Loreto Cascales, aseguró el sábado que “el debate de la religión es una cortina de humo para tapar la negligencia de Marzà y Puig”. “Quieren eliminar la religión concertada y católica sinimportar la demanda y, sin embargo, introducen la musulmana”, afirmó.

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