La economía circular desde una perspectiva de género: “Los modelos de liderazgo deben cambiar”

La documentación histórica recoge que la primera mujer en recorrer el mundo fue la francesa Jeanne Baret en el año 1769. Para lograr realizar la expedición en el barco tuvo que hacerse pasar por hombre. En honor a ella y a su historia prácticamente desconocida, han creado el proyecto Homeward Bound, una expedición a la Artántida que se lleva a cabo cada año exclusivamente por mujeres. En ella participan mujeres que se dedican las competencias STEM, ciencia, tecnología, ingeniería y matemática y realizan reflexiones internas y externas sobre el cambio climático y las posibilidades que da la economía circular.

Una de esas mujeres es Edith Guedella Bustamante, bióloga ambiental y responsable de Sostenibilidad del negocio de Construcción en Acciona, donde coordina la implementación y alineamiento de todos los proyectos globales en materia de sostenibilidad. Guedella Bustamante, recién llegada de su expedición en la Artántida durante 20 días con otras 123 mujeres de 40 países distintos, sobre la necesidad de nuevos liderazgos en el VII Encuentro Internacional de Economía Circular celebrado en Donostia. “Homeward Bound tiene como objetivo formar a 10.000 mujeres hasta 2026 para lograr soluciones a problemas globales como el cambio climático o la justicia social. El programa consiste en un año de formación online y esa formación termina en la Antártida. Hemos generado el inicio de sinergias para dar soluciones a estos problemas bien sea a través de proyectos colaborativos, pero también a través de la introspección personal que nos ha generado este viaje”, ha explicado durante su intervención en el encuentro.

Según ha explicado, durante su estancia en la Antártida ha sido consciente de la “vulnerabilidad de su paisaje majestuoso”. “De forma muy evidente nos muestra los signos del cambio climático, hay muchísima más vegetación, áreas cubiertas de verde cuando no es lo esperado. Hay especies de pingüínos que están siendo desplazadas precisamente porque la temperatura en la Antártida ha subido 4 grados. Está claro que no hay que alarmar en la divulgación, pero no podemos parar. La ciencia es la que nos dice que el cambio climático está aquí. Para todas nosotras ha sido una conexión de primera mano con la naturaleza y los sistemas, pero con el compromiso de generar ese impacto a través de distintos proyectos”, ha detallado Guedella Bustamante, que en su caso ha creado un proyecto de descarbonización.

“Queremos fomentar estos modelos de liderazgo diferentes, inclusivos, humanistas, que busquen el diálogo de las distintas perspectivas para dar lugar a esas soluciones a estos problemas complejos que vivimos. Los modelos de liderazgo deben cambiar y ser diferentes. Una de las cosas que tengo claras es que los modelos de liderazgo no pueden ser los que vemos actualmente, tienen que ser realmente transformacionales que permitan este cambio. Por lo tanto, requerimos de estos espacios de diálogo, de espacios de cocreación, de estas visiones críticas, pero desde una perspectiva respetuosa y aquí creo que las mujeres tenemos mucho que decir”, ha concluido la bióloga ambiental.

Guedella Bustamante ha participado junto a Leticia Saiz Rodriguez, directora de Desarrollo e Innovación de Signus Ecovalor y Adelaida Sacristán, directora de Estudios en Fundación Cotec en la mesa Mujeres y Sostenibilidad como miembros de WAS (Women Action Sustainability), una asociación que cuenta con el objetivo de “elevar la sostenibilidad al primer nivel estratégico de las empresas, entidades, instituciones y de la sociedad” y, para ello, busca “promover el papel de la mujer para elevar la sostenibilidad al primer nivel de decisión en todas las áreas”.

Desde WAS buscan “reinventar” cuestiones como la gobernanza, la economía y el empleo para lograr unos objetivos que mejoren las empresas, pero también de sus trabajadores. Para ello, proponen nuevas estrategias como fomentar un “liderazgo humanista e inclusivo incorporando a la mujer en los órganos de decisión”, plantean nuevas formas de trabajo como el teletrabajo y apuestan por la “formación durante toda la trayectoria laboral y atrayendo al mejor talento”. Mientras que, en el plano económico buscan impulsar “nuevos modelos de producción industrial sostenible, la descarbonización de las cadenas de suministro y la economía circula” y redefinir “modelos de producción y consumo, respetuosos con la biodiversidad terrestre y marina y apoyando al sector agroalimentario”.

Desde su primera edición en 2019, el Encuentro Internacional de Economía Circular ha reunido a más de 3.000 personas y 250 ponentes internacionales. En esta última ocasión, más de 40 expertos internacionales se han dado cita para abordar los grandes retos de la economía circular, desde la descarbonización y la reindustrialización hasta la inteligencia artificial y la eficiencia en el uso de recursos.