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El Festival de Cine de Ourense, ausente tras 22 años por el retraso del Ayuntamiento en aplicar la Ley de Contratos

Una de las sesiones de la edición 2017 del festival

Marcos Pérez Pena

El Festival Internacional de Cine de Ourense (OUFF) no se celebrará este año. El certamen, que echó a andar en el 1996, se ha consolidado en las 22 ediciones realizadas en este tiempo como una de las más importantes citas cinéfilas de todo el Estado. Sin embargo, el retraso del Ayuntamiento de Ourense a la hora de aplicar la nueva Ley de Contratos, en vigor desde el pasado 8 de marzo, ha provocado que el festival se quede sin tiempo para la organización del certamen en sus fechas habituales (el mes de octubre).

El equipo que en los últimos años se viene ocupando de la gestión del festival, comandado por Fran Gayo como director y Analía G. Alonso como productora ejecutiva, llevaba ya varios meses trabajando en los contenidos de la 23ª edición, que ya contaba con tres retrospectivas confirmadas, alguno de los integrantes del jurado, el premio Ciudad de Ourense, un nuevo reglamento y una reestructuración de los galardones y una algunas películas confirmadas para el concurso y también para las secciones no competitivas. Sin embargo, parece muy complicado que todo esto se pueda completar antes de que remate el año.

En marzo entró en vigor la nueva normativa que regula las contrataciones públicas (aprobada el pasado mes de noviembre), y que obliga a la convocatoria de un concurso para la contratación del equipo gestor del festival. Sin embargo, desde el Ayuntamiento se ha esperado hasta ahora para licitar el concurso, que aún debe redactar y aprobar sus bases. Esto aplazará la convocatoria del propio concurso hasta el mes de septiembre y no se podría resolver antes de finales de noviembre. A partir de ahí el nuevo equipo podría comenzar a trabajar en el diseño del festival que, por lo tanto, no se podrá celebrar en este 2018.

Fran Gayo y Analía G. Alonso publicaron este martes un comunicado muy crítico con la manera en la que el Ayuntamiento de Ourense ha gestionado esta situación. Señalan, por ejemplo, que supieron “del anuncio de licitación por los medios de comunicación” y añaden que ha sido “una decisión unilateral” por parte del Ayuntamiento. En el texto subrayan su “perplejidad y decepción ante la manera despistada en que las cosas se han ido sucediendo” y recuerdan que “la Ley de Contratos entró en vigor el 8 de marzo”. “Es decir, o bien su contenido no fue estudiado en profundidad hasta dos meses después de esa fecha o bien se nos dejó trabajar sin desvelar las consecuencias que tendría en la contratación del equipo”, dicen.

El pasado mes de febrero el equipo del festival (que ha organizado las dos últimas ediciones) presentó su renuncia a continuar en este año 2018 debido a una grave situación de impagos por parte del Ayuntamiento de Ourense a diferentes proveedores, miembros del equipo del OUFF y a varias de las películas premiadas.

Estos problemas se añadían a otros que habían tenido lugar en los meses previos a la edición 2017, y que habían tenido como consecuencia la retirada de varios patrocinadores. Sin embargo, desde el Ayuntamiento de Ourense se comunicó el compromiso de resolver los pagos pendientes (algo que sí se ha hecho) y los restantes defectos denunciados. Es por eso que el equipo decidió retomar su trabajo para la organización de la edición 2018.

A comienzos de mayo desde el Ayuntamiento se señalan los problemas que pueden surgir por la aplicación de la nueva Ley de Contratos e informan de que, si bien el director del Festival podría ser contratado directamente, el resto de los trabajadores no podrían continuar. Después de varias reuniones y de explorar otras posibilidades, el Ayuntamiento de Ourense ha adoptado finalmente la decisión de licitar el concurso para la organización del OUFF, pero sin comunicárselo al equipo que ha venido gestionando el festival en los dos últimos años. Los trabajadores denuncian que esta situación les perjudica gravemente: “Es nuestro oficio, lo que nos da de comer, y este tipo de maniobras nos afectan muy seriamente. Comprometerse con el OUFF implica bloquear nuestras agendas de trabajo por varios meses, en algunos casos por más de la mitad del año”.

22 años de OUFF

El Festival Internacional de Cine de Ourense comenzó a celebrarse en 1996. El pasado año se proyectaron 77 películas y en sus sesiones (y otras actividades programadas) participaron unas 7.500 personas. La apuesta por el cine iberoamericano de autor ha consolidado la cita ourensana entre los más importantes festivales que todos los años se celebran en España. Destaca también su compromiso con el audiovisual gallego y, de hecho, en el 2017 los filmes de apertura y clausura fueron gallegos y más de 2.500 personas vieron cine producido en la comunidad. Asimismo, desde hace años viene realizándose OUFF Escola, un certamen escolar que en el 2017 recibió 77 cortometrajes en los que participaron alrededor de dos mil niños y niñas de centros de enseñanza de toda Galicia.

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