No nos engañemos, jugar a videojuegos no es un deporte
Los eSports están viviendo una auténtica época dorada gracias a su tremenda difusión. De hecho títulos como League of Legends y DOTA 2 no se entenderían si toda la parafernalia de jugadores profesionales, sponsors, campeonatos, premios millonarios y retransmisiones en directo vía streaming, las cuales en ocasiones llegan a lograr picos de audiencia que dejan en bragas a un buen número de acontecimientos político-sociales de renombre.
La gente que quiere dedicarse a esto tiene que entrenar varias horas diarias estudiando a sus rivales para ir mejorando poco a poco y escalando en los rankings mundiales. Una vez arriba unos pocos elegidos se convierten en auténticas estrellas, llegando a firmar contratos que poco o nada tienen que envidiar a los de muchos deportistas profesionales.
¿Pero toda esta dedicación, todo este trabajo y esfuerzo, unido a los campeonatos, torneos y sus correspondientes retransmisiones en directo, puede ser considerado un deporte al uso? John Skipper, de ESPN, afirma que no. Y su opinión debería valer para algo si tenemos en cuenta que se trata del presidente de uno de los canales deportivos más importantes del mundo, por el cual además se han retransmitido varios torneos de videojuegos con bastante éxito:
“No es un deporte, es una competición. El ajedrez también es una competición. Principalmente, yo estoy interesando en los deportes reales”.