El emotivo homenaje de “La Veneno” en la Plaza de Chueca
La persistente lluvia que ayer por la tarde cayó en toda la ciudad no fue obstáculo para que cientos de personas se acercaran hasta la Plaza de Chueca a rendir su personal homenaje a Cristina Ortiz, “La Veneno”, que nos dejó el pasado 9 de noviembre por un fuerte traumatismo craneoencefálico cuyas causas aún se investigan.
Aunque se realizó una primera autopsia que determinó que su fallecimiento se debía a causas naturales, a petición de la familia de Cristina se llevará a cabo una segunda autopsia con la que esperan conocer las circunstancias de la muerte, que creen no ha sido algo accidental.
Como tampoco creen muchas otras personas anónimas y conocidas de “La Veneno” que su desaparición se deba al azar. Mientras esperaban su turno para firmar en el libro de condolencias que los organizadores del homenaje habilitaron para la ocasión, varios corrillos comentaban en voz baja sus sospechas de que todo fuera fruto de una venganza por la publicación de su libro o, incluso, que el responsable fuera su pareja.
Y todos ellos coincidían en el importante papel que Cristina jugó en la visibilización de la realidad trans. «Si ella no se hubiese dado a conocer tal y como lo hizo, prácticamente la transexualidad en vez de avanzar iría para atrás», comentaba Sandra, una de sus amigas.
El acto no sólo sirvió para reclamar una calle para Cristina, sino también para recordar su memoria leyendo fragmentos de su polémica biografía, “¡Digo! Ni puta ni santa”, donde no solo ahonda en su cruda infancia y adolescencia, sino que también revela contactos sexuales con personas influyentes, políticos y futbolistas.
Junto a este pequeño homenaje de la Plaza de Chueca, el jueves 24 de noviembre, a las 19:00 horas, la Iglesia San Antón (C/ Hortaleza, 63) oficiará una misa funeral a Cristina.
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