El Audi A5 recibe nuevas versiones microhíbridas y en el futuro será 100 eléctrico
De una manera que parece involuntaria pero podría no serlo, Audi ha dado a conocer un nuevo modelo que enriquecerá su catálogo de vehículos 100% eléctricos. En una fotografía que acompaña al dosier sobre los planes de electrificación de la marca aparecen cuatro modelos de baterías, tres de ellos ya conocidos (los e-tron, e-tron GT y Q4 e-tron) y un cuarto oculto casi completamente por una lona. Sus formas y tamaño parecen indicar que nos hallamos ante el futuro relevo del A5, que podría ser enteramente eléctrico y, en tal caso, pasar a denominarse A5 e-tron, como el resto de sus hermanos de gama.
Todos los indicios apuntan, de hecho, en esta dirección. A comienzos de 2019, Audi confirmó que estaba desarrollando un modelo eléctrico de tamaño similar al del A4, competidor por lo tanto de los Polestar 2 y BMW i4 y, sobre todo, del Tesla Model 3, en el punto de mira de todos los fabricantes debido a su éxito arrollador. La marca de Ingolstadt informó también de que ese coche sería el primero en utilizar la plataforma modular PPE, que comparte con Porsche.
Un plan que contempla 30 modelos electrificados para 2025
Ahora, en el dosier mencionado más arriba, se señala que los planes de electrificación de la compañía, que contemplan poner en el mercado más de 30 vehículos electrificados para 2025 y ampliar de forma inminente la oferta de híbridos enchufables, se asientan en el empleo de cuatro plataformas eléctricas modulares que cubren todos los segmentos.
La plataforma denominada MLB evo sirve de base a modelos SUV de gran tamaño y ya fue usada, convenientemente adaptada, en la construcción del e-tron, el primer eléctrico de la marca. La conocida como J1 (Performance Platform) la compartirán coches de altas prestaciones como el Porsche Taycan y el futuro Audi e-tron GT, y la versátil MEB, común para todo el Grupo Volkswagen, es la que encontramos en el VW ID.3, el Seat el-Born y el Audi Q4 e-tron. Por último, la Plataforma Premium Eléctrica (PPE) se situaría a mitad de camino entre la J1 y la MEB y estaría dedicada a vehículos eléctricos de tamaño medio como el hipotético A5 e-tron.
Bajo la lona, el nuevo modelo presenta unas formas similares a las del e-tron GT, un granturismo de grandes proporciones, pero fuentes de la firma de Ingolstadt citadas por el medio británico Autocar apuntan que “se parecerá más a un A5 Sportback que a un A7 Sportback”, este mucho más semejante en hechuras a aquel. Si sumamos a estas declaraciones el rumor insistente de que el A5 podría prescindir en un futuro no lejano de versiones de combustión interna, no es mucho suponer que el misterioso coche de la imagen colgada en la web de Audi sería ese posible A5 e-tron.
Según los responsables del proyecto, este será el modelo más relevante que haga uso de la plataforma PPE, que servirá tanto para coches de tipo turismo como para SUV de diversa índole, aunque a buen seguro veremos la misma arquitectura en una variedad de vehículos que comprende berlinas, familiares (Avant en la terminología de Audi), todocaminos y versiones Sportback.
Mientras se confirman todos estos extremos, Audi acaba de desvelar también un restyling de los A5 Sportback, Coupé y Cabrio que incluye no solo nuevo diseño, sino también la incorporación de tecnología microhíbrida, que en España les valdrá la etiqueta ECO de la DGT. Las diferentes declinaciones del modelo llegarán a los concesionarios europeos a comienzos del año próximo con motores que arrancan en los 163 caballos y versiones S con potentes V6. Cuatro de los propulsores estarán equipados con un sistema mild hybrid (MHEV) dotado de un motor de arranque/alternador que, conectado al cigüeñal mediante una correa, recupera energía en las deceleraciones para almacenarla en una batería de iones de litio.
En los bloques de cuatro cilindros, el MHEV va integrado en el circuito eléctrico, de 12 voltios, mientras que en las versiones S TDI el sistema eléctrico principal es de 48 voltios. En el caso del S5 TDI, el dispositivo se muestra capaz de reducir el consumo de combustible en uso cotidiano hasta un 0,4%, a base de recuperar energía y apagar el motor cuando el conductor levanta el pie del acelerador.