El PSOE plantea destinar 21 millones de euros a la dotación de la memoria histórica que el Gobierno deja en cero
El PSOE cree que el Estado debería destinar 21 millones de euros para cumplir con la ley de memoria histórica y ejecutar las nuevas propuestas de los socialistas, como que el Estado se haga cargo de las exhumaciones de las fosas comunes de la guerra civil y el franquismo o la “reorientación” del Valle de los Caídos.
Los presupuestos alternativos que la dirección del PSOE ha aprobado este miércoles, y que constituyen la propuesta económica del partido de Pedro Sánchez, recogen una dotación de 21 millones de euros para memoria histórica.
El documento del PSOE no desglosa las partidas concretas pero establece que se destinarían a “exhumaciones, creación de un banco de datos de ADN, comisión de la verdad, elaboración de censo y retirada de simbología franquista, consejo de la memoria de España, redefinición y reorientación del Valle de los Caídos en El Escorial, en cumplimiento de la Ley de Memoria Histórica y conforme a los informes del Comité de Expertos”.
Con esa cantidad, el PSOE lograría financiar las nuevas propuestas que llevó al Congreso y que fueron vetadas por el Gobierno con el respaldo de PP y Ciudadanos. Los socialistas consideran que es el Estado el que debe financiar las exhumaciones de las víctimas del franquismo.
Esa cantidad se reduce a seis millones de euros en la tramitación parlamentaria. El diputado Odón Elorza anunció que presentaría tres enmiendas parciales para incrementar esa cantidad que en los presupuestos de Rajoy es de 0 euros.
En esas enmiendas, que probablemente no lleguen a presentarse dado que el Gobierno no cuenta con los apoyos suficientes para superar la enmienda a la totalidad, el PSOE plantea 300.000 euros para exhumaciones, 200.000 para ayudas a actividades y proyectos de las asociaciones memorialistas y 100.000 para las actuaciones iniciales básicas de redefinición y reorientación del Valle de los Caídos en un centro nacional de memoria, del que se sacarían los restos de Franco. “Con el gobierno somos menos ambiciosos conociendo su nula disposición”, reconocen en la dirección.
