El Estado gasta 24 millones en alquileres para embajadas y residencias diplomáticas en el extranjero

España cuenta con más de mil diplomáticos. La mitad de ellos desempeñan su labor en el extranjero, en las 118 embajadas, más de un centenar de consulados y nueve misiones especiales que tiene en todo el mundo. Además de la amplia red consular que es de su propiedad, el Estado gastó 24 millones de euros en 2021 para sufragar los alquileres de las cancillerías, y también viviendas para el cuerpo diplomático, locales, oficinas, garajes y un trastero, según la información a la que ha tenido acceso elDiario.es a través de una consulta al Portal de Transparencia. En total, se arrendaron 267 inmuebles. 

Estados Unidos, China y Rusia son los países en los que más cuestan los alquileres de los que dispone el Estado para la acción exterior. En el primero de ellos se invirtió en 2021 un total de 2,8 millones de euros para los consulados de Boston, Chicago, Houston, Los Ángeles, Miami, Nueva York, además de un garaje en Washington (la embajada es propiedad del Estado) y la misión permanente de España ante la ONU de Nueva York. Ese alquiler supuso 824.829 euros. 

Se trata del segundo más caro. El primero es la cancillería de Moscú, donde se pagó 1,5 millones de euros. En el lado opuesto está Accra (Ghana), donde el pago registrado correspondiente a cancillería y vivienda fue de 562,81 euros. 

En China la cifra asciende a dos millones de euros para el consulado de Cantón (300.000 euros), Hong Kong (229.425 euros para la cancillería y un garaje por 6.898 euros), Shangai (893.176 euros para la cancillería y un local) y Pekín, donde España dispone de tres inmuebles para cancillería y/o residencia y dos locales por un importe total de 834.169 euros.

En el caso de Afganistán, el alquiler de la cancillería y una residencia supuso un coste de 375.400 euros en 2021 antes de la salida del país por el avance de los talibanes. Por ahora no está previsto el regreso a Kabul, pero el ministro de Exteriores, José Manuel Albares, aseguró en una entrevista en elDiario.es que estaría dispuesto a que volviera el embajador si se dan las condiciones de seguridad. 

El grueso de los alquileres corresponde a las cancillerías y residencias destinadas a la diplomacia. El documento remitido a esta redacción por la dirección general del servicio exterior especifica que tres de ellos corresponden a viviendas de funcionarios (en Argel y Lagos). No obstante, también hay diez definida como “oficina anexa” -la mitad de ellas en La Habana-, cinco locales (uno en La Habana, otro en Orán, dos en Pekín y uno en Shangai) y un trastero en Ginebra correspondiente a la representación española ante la Organización Internacional del Trabajo.