Cientos de personas denuncian con una 'besada' que su amor “no se cura”

Un centenar de personas se han concentrado este sábado en la plaza Zerolo de Madrid para besarse en protesta por las terapias de “aversión y conversión” dirigidas a personas LGTBI+ que ha estado acogiendo el Obispado de Alcalá de Henares, y reivindicar que su amor “no se cura”.

Convocada por la asociación Kifkif y otros colectivos LGTBI de la ciudad, entre ellos Cogam, parejas de todo tipo de orientación sexual han acudido a esta “besada” para mostrar su amor y mosstrar su rechazo a estas pseudoterapias que se imparten en el Centro de Orientación Familiar 'Regina Familiae', un servicio que pertenece a la diócesis de Alcalá, y que buscan 'curar' la homosexualidad.

Los convocantes han exigido el cumplimiento de la Ley de Protección Integral contra la LGTBifobia y la Discriminación por Orientación e identidad Sexual en la Comunidad de Madrid, que contempla sanciones muy graves por promocionar o realizar terapias “de aversión o conversión” con la finalidad de modificar la orientación sexual o identidad de género de una persona.

Para la comisión de esta infracción será “irrelevante” el consentimiento prestado por la persona sometida a tales terapias, según recoge la ley regional.

A la protesta han acudido el diputado regional en la Asamblea de Madrid Eduardo Fernández Rubiño, la diputada socialista Carla Antonelli Delgado, y la portavoz socialista en el Ayuntamiento, Puri Causapié.

Además de la gran 'besada', los concentrados, la gran mayoría con banderas arcoíris, han entonado canciones como “Al Obispado lo queremos fuera” y “Bon this way”, de Lady Gaga.

El Obispado de José Antonio Reig Pla ha negado que imparta cursos encaminados a curar la homosexualidad, como publicó eldiario.es, aunque “no renuncia a acoger y acompañar a las personas que libremente lo solicitan” de forma “integral, pastoral y espiritual”.

La Comunidad de Madrid investigará estos cursos tras dos denuncias registradas por el parlamentario regional Fernández Rubiño y por la asociación Arcópoli.

La organización de consumidores Facua Madrid y el Colectivo LGTB+ de Madrid Cogam también han presentado denuncias ante la Consejería de Políticas Sociales y Familia de la Comunidad de Madrid para exigir la apertura de un expediente sancionador tanto a la supuesta terapeuta como a la institución promotora de los cursos, el Obispado de Alcalá de Henares.