Has elegido la edición de . Verás las noticias de esta portada en el módulo de ediciones locales de la home de elDiario.es.
La portada de mañana
Acceder
Una denuncia de la extrema derecha lleva al límite al Gobierno de Sánchez
Crónica - El día que Sánchez se declaró humano. Por Esther Palomera
Opinión - El presidente Sánchez no puede ceder

“El silencio de la mayoría de hombres permite que una minoría maltrate a las mujeres”

El silencio de la mayoría de los hombres permite que una minoría ejerza la violencia machista.

Eduardo Azumendi

La mayoría de los hombres ni golpea ni agrede sexualmente a las mujeres, pero permanece en silencio ante esa violencia y con su actitud permite que esas situaciones continúen, según el investigador Michael Kaufman. Este experto, cofundador de la campaña del Lazo Blanco en contra de la violencia contra las mujeres, ha participado en una conferencia dentro una jornada organizada por el Instituto Vasco de la Mujer-Emakunde para conmemorar los diez años desde que se aprobó la ley vasca para la igualdad. Según Kaufman, si los hombres no se involucran en esta lucha “se perpetuará el patriarcado”.

“Los hombres no son monstruos, ni los enemigos de las mujeres. Y, probablemente, la mayoría tampoco son violentos, pero con su silencio han dejado que sucedieran cosas”, ha denunciado. Precisamente para romper ese silencio surgió la iniciativa del Lazo Blanco en 1991 en Canadá, que ya se ha extendido por numerosos países del mundo, y que significa “una promesa de no permanecer más en silencio y un compromiso de oponernos a la violencia contra las mujeres”.

Kaufman ha presentado la actual como una sociedad patriarcal, en la que los hombres, por el hecho de serlo, “ostentan privilegios y ventajas desde su nacimiento”, pero, a su vez, esa misma sociedad también les plantea unas “expectativas de masculinidad que ninguno puede cumplir, ya que deben ser rudos, fuertes, valientes, no llorar, no sentir emociones etc..”. “Son los líderes, los jefes, los legisladores, los que controlan la economía, los guías y los que tiran del carro de la familia...hay que cambiar esos principios del patriarcado, porque un hombre que golpea a su esposa o novia utiliza la violencia para ejercer el poder”, ha dicho.

Los valores del patriarcado

Ha relatado que la familia y la sociedad “llenan a los bebés de valores del patriarcado; les hablan y tratan de forma diferente a niños y niñas”, y eso provoca que el cerebro se desarrolle de forma diferente en unos y otras. Para este investigador, la solución pasa por buscar fórmulas para que los hombres se conviertan en aliados de las mujeres y participen en la lucha por la igualdad, y el primer paso es “replantarse” qué significa ser un hombre.

En esta labor influyen los cambios en las vidas de las mujeres, cómo se expresan los líderes y dirigentes de la sociedad, las leyes, las transformaciones en los lugares de trabajo, y los mensajes lanzados en los medios de comunicación. También es importante modificar la paternidad y que los hombres se responsabilicen de la mitad del trabajo doméstico, porque es bueno para las mujeres, para los hijos y también para los propios hombres, ya que contribuye a que sientan “más empatía”, según ha concluido.

Etiquetas
stats