Rueda admite que la Xunta no se interesó en 16 años por los bidones con restos radiactivos frente a la costa gallega

El presidente de la Xunta, Alfonso Rueda, admite que en los 16 años de gobiernos de su partido, el PP, en Galicia no se interesó por el estado de los bidones con residuos radiactivos que están sumergidos en la fosa atlántica, a unos 700 kilómetros de las costas de Galicia. “Lógicamente”, señaló, sabía de este cementerio nuclear, en el que los últimos restos se depositaron a principios de los años 80 del siglo pasado. La zona se dejó de usar para este fin después de una movilización en contra.

El asunto ha vuelto a la actualidad debido a que una expedición francesa se ha desplazado a la zona y está identificando una parte de estos bidones y tomando muestras. La conselleira de Medio Ambiente, Ángeles Vázquez, utilizó la actividad de ese grupo de científicos para criticar al Gobierno central por no informar a la Xunta. Pero, en su primer mensaje en redes al respecto, dijo que desconocía la propia existencia de esos residuos en esa localización: “No es de recibo que tengamos que enterarnos por la prensa de un asunto tan sensible como la presencia de material potencialmente peligroso ante nuestra costa”.

Después de recibir varias respuestas que le recordaban que la cuestión era de dominio público, trató de justificarse: “Como apuntáis algunos, la existencia de los bidones frente a Galicia es de sobra conocida desde hace años, también por mí. Quería evidenciar que, una vez más, el Gobierno central no informó a la Xunta de acciones como la campaña francesa en marcha”.

Rueda manifestó este lunes, en respuesta a preguntas de los medios, que conocía la presencia de estos residuos en la fosa atlántica y reconoció que ni su equipo ni los anteriores -de los que él formó parte como conselleiro y vicepresidente- se interesaron por el estado de los bidones. “No parece muy lógico decir que el problema es que la Xunta de Galicia no se interesó, cuando lo único que puede hacer es lo que estamos haciendo [pedir información]. Escuché a la conselleira y estoy totalmente de acuerdo con ella, falta información transparente”, manifestó.

Por el momento, señaló, no ha recibido datos oficiales sobre la actividad o los datos obtenidos por la expedición. “No pretendo hacer una pelea política con esto”, aseguró e insistió en que el Gobierno central es el que debe trasladar la información. Pidió que cualquier decisión que se tome sea “de la mano” de la Xunta.